*Punto de vista de Alice*
Victoria se paró en la puerta y observó cómo la bestia gigante se acercaba cada vez más a mí. El hecho de que ella hubiera creado un pícaro mutado para parecerse a Simon con la intención de molestarme realmente me cabreó y me rompí el cuello de un lado a otro.
No dejaría que esto le diera mal nombre a Simon.
Salté, dejando que mis garras se extendieran aún más mientras iba a cortarle la garganta. Pero a diferencia de los otros pícaros, se movió rápidamente y evadió el ataque, contraatacando con uno de los suyos.
Mis ojos se abrieron y apenas logré evitarlo dando un paso atrás para reevaluar. Este mutante parecía más cruel y delirante de lo que jamás había visto.