Los ojos de Lacey se abrieron de golpe y estaba mirando fijamente a Scar. Lacey trató de gritar, pero Scar le puso un cuchillo en la garganta.
—Grita, y te mataré a ti y a Julien también —dijo Scar.
La ira llenó el pecho de Lacey mientras evaluaba rápidamente su entorno. Había un gran ventanal cerca, y la vía intravenosa todavía estaba en su brazo, pero Lacey pudo sacarla fácilmente. Miró hacia el pequeño sofá en la esquina y Julien se había ido. Probablemente había salido a buscar algo de comer. Pero eso estaba bien. Lacey sonrió. Quería a Scar para ella sola.
Era el momento de la venganza.
Lacey asintió una vez y Scar retiró la mano, pero aún sostenía el cuchillo en su garganta. —Pensé que era hora de que tuviéramos una pequeña charla... de mujer a mujer.
—Lástima que no eres una. —Manteniéndose tan quieta como pudo para no llamar la atención de Scar, Lacey comenzó a quitarse la vía intravenosa de la mano. Una vez que fuera libre, Scarlett sería suya.