Visitando una casa a la cuál, se estaba dando una fiesta, habían personas bebiendo alcohol, otras durmiendo y otros bailando. No soy afin a esas actividades, estoy aquí porque me invitaron, pero no logro ver a xxxx...
Decidí ir al segundo piso para ver si estaba allá, o poder estar en una habitación a solas. Al subir al segundo piso me topo con un corredor largo y angosto, dónde al finalizar este, se encuentra un cuadro de pintura de un paisaje de una casa encima de una montaña. El pasillo se dividía entre tres puertas, fui a la primera puerta, toque con mi mano cerrada transmitiendo en toc toc como respuesta, no me respondió nadie, creo que es una buena señal, intento abrir la puerta empuñando la manija, pero no gira... La segunda puerta, se escucha el toc toc pero sin respuesta de igual manera, está tampoco abre... La tercera un toc toc se hace presencia de nuevo, a diferencia de las dos anteriores, esta si abre...
Dí unos cortos pasos, entré la mitad de mi cuerpo en señal de curiosidad y de respeto, mire a los alrededores y no ví a nadie... Decidí entrar todo mi cuerpo y cerrar la puerta, el sonido de los gritos de las personas y de la música son insoportables, y eso que son canciones que me gustan, pero no hay que ser exagerados en esta vida, diría un profesor que conozco, se me sale una sonrisa de mi cara; de un sobresalto mi mente me indica que estoy en un lugar ajeno, no es momento de relajarse... Diría mi ansiedad si tuviera boca... Miro a mis alrededores mirando cosas que pueda reconocer... Es un cuarto algo grande, lo suficientemente grande como entrar una cama para dos personas, un televisor bastante grande, un sofá para una persona y dos armarios pequeños. Después de caminar en círculo y explicarle a mi ansiedad que todo iba a estar bien, me pose en la cama, en la esquina de la cama, pose mi rodilla, mire a los alrededores, luego me senté, volví a mirar a mis alrededores, y me deje callendo muy despacio encima de la cama sin dejar mirar, sin dejar de observar.
Ya acostado boca arriba, pude ver una luz que aparecía en el techo, era un reflejo... Inclino mi cuello para mirar hacia el frente, y veo una ventana con los vidrios cerrados, se me había pasado por alto que había una ventana, tal vez estaba tan cansado que ni lo noté.
Acostado allí cerré mis ojos, y sentia mi cuerpo calentarse, sabía que si seguía así, me iba a quedar dormido, asi que busque mi celular para poner una alarma si la necesito, igual creo que no serviria de nada, diria mi ansiedad si tuviera boca, el argumento que ella da, es que con la bulla que hay detras de la puerta es casi imposible para mí despertarme si me acostumbro a la música, no podré oir la alarma, y ¿Qué tal, que el dueño de esta habitación me encontrase así durmiendo?, sí, daría vergüenza, le respondo a mi ansiedad. Mejor me dispongo a buscar algo para pasar el tiempo... Busco por la habitación intentando encontrar una revista, un libro o el control del televisor, pero no la encuentro, segun yo, la busque por todas las esquinas del cuarto, hasta debajo de la cama... Después recuerdo que iba a colocar la alarma, busco mi celular ya no para colocar la alarma sino para ver algún vídeo o ver mis fotos de la galería, saco mi celular, veo mis mensajes, esperando la respuesta de xxxx... Pero no encuentro el contacto, agg me queje preguntando, ¿cómo es que lo había guardado en mi celular?, intento recordar su nombre pero no aparece en mis pensamientos, de pronto mi propia cara da un seño de curiosidad e incertidumbre... ¿Por qué estoy acá?, no logro recordar a xxxx, cuanto más intento recordar, más se nubla mi mente.... TOC TOC, ese sonido me saco de mis pensamientos, habían tocado la puerta muy, pero muy fuerte...