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Su Chengyu observaba desde la distancia, seguro de que a ese alcance, definitivamente no sería detectado, y aunque lo fuera, tendría suficiente tiempo para escapar.
La dama de verde estaba siendo reprimida por los esfuerzos conjuntos de dos grandes Reyes Demonio y estaba en desventaja, su derrota era solo cuestión de tiempo, especialmente porque el torbellino Rompecielos Celestial sobre el mar comenzó a moverse hacia los tres.
La mujer vestida de verde fue lanzada por uno de los Reyes Demonio, que tenía una cara fea con un hocico puntiagudo y parecía una rata vieja, obligándola a retroceder explosivamente.
—Entrégame el objeto, no podrás escapar —dijo el Rey Demonio de cara fea.
Sin embargo, la dama de verde replicó con una sonrisa juguetona:
—No lo entregaré. Si puedes, atrápame dentro de este torbellino Rompecielos Celestial.