Por la tarde, ya habían llegado a la Montaña de la Nube de Niebla. Yu Yanshu escuchó voces que venían desde fuera de la cueva, lo que la puso inmediatamente tensa.
Las Bestias no eran su principal temor, sabía cómo manejarlas, pero si se topaba con un experto, eso sería peligroso.
Yu Yanshu se dirigió silenciosamente hacia la entrada de la cueva y vio a varias personas en el bosque exterior.
—No sé qué habrá pasado dentro de la Montaña de la Nube de Niebla, pero una montaña se derrumbó y la niebla omnipresente finalmente se ha disipado.
—No nos preocupemos por eso ahora, vamos a buscar alrededor. Si tenemos suerte, podríamos encontrar algunos tesoros naturales. Hace unos días, en la conferencia comercial, alguien intercambiaba Elixires y manuales secretos por hierbas medicinales. Si nosotros también podemos conseguir algunas hierbas, quizás podríamos intercambiarlas por algunos Elixires.
Al escuchar esta conversación, Yu Yanshu se sintió aún más aprensiva.