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Al escuchar palabras tan seguras del otro lado, el Anciano Chu finalmente pudo suspirar aliviado.
Sería mejor si pudiera ir a la Puerta Oculta.
Lo demás podría discutirse más tarde.
—Por cierto, ¿cuál fue el resultado del duelo? —preguntó Ren Feifan.
El Anciano Chu acarició su barba y reportó todos los nombres que habían avanzado.
Lo que sorprendió a Ren Feifan fue que la hermana mayor de la Secta Emei también había avanzado.
Sin embargo, pensó que considerando el cultivo y potencial del oponente, que habían sido evaluados anteriormente como de primera, en realidad sería una pena si ella no pudiese asegurar un lugar.
Otra cosa que sorprendió a Ren Feifan, fue que entre los diez que avanzaron esta vez, dos eran de la misma secta.
¡Esa era la Secta Libre y Desenfrenada!