Pedro Brown miró alrededor y, al ver que nadie le prestaba atención, en secreto hizo el sello con las manos y lanzó un pequeño disco de formación hacia el centro del lugar.
Tan pronto como el disco de formación se desplegó, y el sello de las manos de Pedro se activó, la Matriz de Reunión Espiritual estaba ya en funcionamiento.
En ese momento, Pedro sintió claramente que la energía espiritual no venía del cielo, sino que estaba brotando en grandes cantidades del suelo.
La densa energía espiritual envolvía completamente el Campo Espiritual y, debido a la formación, la energía espiritual no se escapaba.
Incluso Pedro estaba secretamente sorprendido en este punto, ya que esto estaba lejos de ser una densidad ordinaria. Todo el Campo Espiritual estaba lleno de energía espiritual.
Al examinarlo más de cerca, Pedro vio que había energía espiritual que venía del cielo, pero era mucho menos abundante que la energía espiritual que emergía del subsuelo.
