—Gemido, gemido, gemido, Didi no quiere comer ni beber lujosamente, Didi tiene miedo...
—Finalmente, incapaz de soportar la presión, Didi comenzó a llorar fuerte por miedo a la imponente manera de la anciana doncella.
—¡Llora de nuevo, y te estrangularé ahora mismo! —gritó ferozmente la anciana doncella, su mano marchita agarrando el cuello de Didi.
—Una sensación de asfixia se apoderó de ella, y Didi estaba tan asustada que dejó de llorar, incapaz de articular una palabra, y solo podía mirar a la anciana doncella con terror.
—Solo entonces la anciana doncella soltó, revelando una sonrisa satisfecha y perversa: "Así está mejor. Escucha, voy a organizar que atiendas a alguien en breve."
—Esta persona es muy importante; en el futuro, será el heredero de la Secta del Amanecer, el futuro maestro de la Secta del Amanecer."
—Hoy te estoy dando esta oportunidad, y me estarás agradecida por el resto de tu vida."