La cara de la reina de Indonesia se volvió rojo carmesí, casi sofocándose.
Janice Randall estaba extremadamente ansiosa, preocupada por el bienestar de su madre. —Maestro Jones, debe salvarla.
—Mi madre es de status noble, la reina de Indonesia. Ella no puede morir.
—Maestro Jones, si salva a mi madre, prometo darle cien millones de dólares.
Janice sacó frenéticamente un cheque, escribió el número mil millones en él y firmó su nombre.
Samuel Jones se mantuvo tranquilo, aceptó el cheque por cien millones y lo guardó en su bolsillo.
—Quédese tranquila, señorita Randall, ya estoy haciendo todo lo posible.
El Maestro Jones avanzó, agarró la muñeca de la reina de Indonesia, para darle un diagnóstico.
—La reina sufre de insomnio y frecuentes pesadillas, ¿despertándose sobresaltada en medio de la noche, correcto?
—¡Sí!
—La reina también tiene infarto agudo de miocardio, probablemente debido a su rica dieta, que ha causado endurecimiento arterial y excesiva ingesta de grasa.