Román Torres apartó la mano de Poppy Torres.
—Los familiares deben actuar rápidamente, no hay tiempo, ¿quién donará la sangre? —urgió la enfermera.
—Tío, te lo suplico, mi mamá está sangrando mucho, el doctor dijo que solo puede aguantar como máximo tres minutos —rogó amargamente Poppy Torres—. Si tú no ayudas, mi mamá morirá por la pérdida excesiva de sangre.
—Poppy... no es que no quiera ayudarte, pero mi salud no es buena y estoy envejeciendo —suspiró Román Torres, pareciendo muy sincero—. Poppy, sabes que este año cumplo setenta, y aunque soy médico de medicina china, también necesito cuidar mi salud con hierbas medicinales.
—¿Setenta años? No importa, sacar 200 cc de sangre no supondrá un problema —dijo Poppy Torres—. Quedan dos minutos. La paciente tiene sangre HR-negativa, que es muy rara y se transmite solo dentro de su familia directa. ¿Alguien aquí tiene sangre HR-negativa? —dijo la enfermera.
