—¿A punto de morir? ¿Qué está pasando? —preguntó Guillermo Cole con preocupación.
—Estás saludable, y en cuanto a la enfermedad que llevas dentro, toma la medicación que te proporcioné, cuida de tu cuerpo cada día. Incluso si no vives otros veinte, treinta años, al menos dentro de los próximos diez años, no deberías tener preocupaciones de salud —comenzó Guillermo Cole—. Como médico, no veo ninguna razón para tu muerte. ¿Por qué crees que morirás?
El Patriarca sacudió su cabeza:
—No lo entenderías, involucra todo tipo de conflictos.
—Todo lo que puedo decirte es que hay más de unos pocos en Ciudad Capital que me quieren muerto —continuó.
—Ciudad Capital no es tan simple como parece en la superficie, detrás de escena, hay numerosas manos empujando el progreso.