Un visiblemente enfermo Fraser Acosta se acercó con sus hombres.
—¿Fraser Acosta? —William Cole frunció el ceño.
Fraser Acosta mostró una sonrisa feroz.
—Chico, eres bastante duro, te atreviste a hablar frente al Señor Buda, ¿'no dejes que toque a Minnie Wright'?
—¡Pues adelante!
—Con el Señor Buda interviniendo, no me atrevería a tocar a Minnie Wright. Pero, ¿quién demonios eres tú? No eres nada más que un médico descalzo de una clínica destartalada. He investigado tu pasado. Fuiste un huérfano desde el principio, criado en un orfanato, luego te convertiste en el despojo de un yerno. Porque has aprendido algunas habilidades médicas, has conocido gente de las familias Warner, Hayes y García, salvaste al hombre más rico de Canadá, Anthony Torres, e incluso salvaste a Eileen Davidson en Ciudad Capital. Tienes suerte, deberías haber ascendido a nuevas alturas, pero, ay...
Entonces, Fraser Acosta mostró una sonrisa socarrona.