—Observando al asesino que acababa de hablar duro, afirmando que él tenía principios de asesino, implorando por misericordia y revelando el nombre de su empleador en menos de ocho segundos, todos no podían evitar suprimir su risa.
Sin embargo, a partir de esto, todos también supieron lo formidable que eran las habilidades del Maestro Lin.
Él era en efecto como decían los rumores.
Si no lo provocabas, él sería muy educado contigo y te trataría bien.
Pero una vez que lo provocabas, tenías que estar preparado para un destino peor que la muerte.
Tenía un sinfín de maneras de lidiar contigo.
—¡Nunca seas un oponente del Maestro Lin! —ese era el consenso entre todos los presentes.
Por supuesto, la mayoría de ellos eran seguidores de la Unión Lin, seguidores de Lin Dong, naturalmente, no se opondrían a Lin Dong.
Y los pocos que vinieron a comprar Medicinas Dan, al no ser parte de la Unión Lin, tampoco querían ser enemigos del Maestro Lin.