Lin Dong abandonó el Patio de la Familia Li y se dirigió directamente a la Posada Penglai, guiado por la ubicación que Li Qingcheng le había enviado.
Él hizo que Ah Lang condujera.
En el camino, pasaron por un bar.
El coche disminuyó la velocidad.
Porque fuera de la puerta del bar, una mujer con ambas piernas mutiladas estaba siendo brutalmente golpeada por un grupo de personas.
—Chen Qingqing, nunca esperaste ver este día, ¿verdad?
—En aquel entonces, le sacaste los ojos a mi hermano simplemente porque te miró en la calle.
—Mi hermana fue humillada solo porque llevaba el mismo vestido que tú. Realmente hiciste que alguien la desnudara en público. Incapaz de soportar la vergüenza, se arrojó de un edificio.
—Y yo, Chen Qingqing, mira bien mi mano. Estabas paseando a un collie, y cuando me mordió, solo me defendí con un golpe. Hiciste que alguien me cortara la mano.
—Ahora que ya no tienes la protección de la Familia Chen, ¡es hora de pagar lo que nos debes!
...
