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Lin Dong comenzó su trabajo, y ese mismo día, hizo algo más que despedir a Huang Meihua, la lacra del equipo.
También se tomó el tiempo para reorganizar a los doctores en el Departamento de Medicina Tradicional China.
Encontró a otros dos médicos cuyas situaciones eran tan malas como la de Huang Meihua.
No solo les faltaban habilidades médicas, sino que también recetaban todo tipo de medicamentos con incentivos, por lo que Lin Dong también despidió a esos dos de inmediato.
La presidenta del hospital no dijo nada al respecto.
Ya que le había confiado a Lin Dong el Departamento de Medicina Tradicional China, le dio plena autoridad sobre él.
Después de arreglar el departamento, Lin Dong se dirigió a la clínica ambulatoria.
Sin embargo, no muchas personas acudían al Departamento de Medicina Tradicional China para tratamiento.
En estos días, la mayoría de las personas todavía eligen la medicina occidental cuando buscan atención médica.
