Aparte del Hermano Serpiente, sus otros seguidores se retiraron en masa, llenos de miedo.
Esta era la Familia Ye; simplemente no podían reunir la voluntad de resistirse.
—¿Qué están haciendo? ¡Ataquen conmigo! —rugió el Hermano Serpiente a todos, y luego tomó la delantera, cargando hacia la gente de la Familia Ye.
—¡Boom! —El Maestro Ye Ruyu entró en acción él mismo, golpeando al Hermano Serpiente en el abdomen, e instantáneamente el Hermano Serpiente fue derribado por su puñetazo.
El Hermano Serpiente estaba atónito, nunca esperó que el Maestro Ye Ruyu poseyera tal poder de combate.
—¡Qué fuerte!
—¡Así que Ye Ruyu también sabe artes marciales!
—¿No se rumoreaba en el exterior que él era solo un playboy? ¿Podría ser que ocultaba sus verdaderas habilidades?
—Es verdaderamente aterrador. Tener tal trasfondo y aún así, su propia fuerza es tan formidable.
...
En ese momento, los hombres tras la Hermana Hong no se atrevieron a avanzar aún más.
