Volví a abrir los ojos, pero no observaba nada, todo era oscuro.
Estaba sentado y comencé a mover mis manos por los alrededores y sentía como estaba sobre un piso de cemento.
Comencé a gatear hacia delante y mi mano derecha, un charco de algún tipo de líquido espeso, había sentido.
Miré mi mano y estaba manchada de sangre, en el momento, delante de mí, se iluminó todo, dándome un fogonazo de luz.
La luz era tan fuerte que tuve que cerrar y cubrirme los ojos con mi mano manchada de sangre por puro instinto.
Miré delante mío y había un cadáver de alguien vestido de negro con un buzo cuello tortuga, que tenía una espada clavada en su pecho.
Di un brinco del susto hacia atrás, sin capacidad de poder razonar, me levanté y salí corriendo desesperadamente de ahí.
«¿Qué es esto? ¿Dónde estoy? ¿Qué pesadilla es esta?»
Muchas preguntas pasaron por mi mente y en cuanto menos lo esperaba.
Todos los ciudadanos a mi alrededor me miraron y se quedaron helados, comenzaron a gritar 'huyan' y 'corran', despavoridos, todos se alejaron de mí.
"¿Qué pasa que tengo?".
Pregunté confuso al aire, mirando hacia ambos lados.
Y entre la multitud aparecieron tres hombres de la misma vestimenta que la persona que estaba muerta en el callejón, uno con una lanza, otro con un arco y el último con una espada, sus armas estaban imbuidas de un aura parecida a la energía que vi en la novela de mamá
Mientras esos tipos se acercaban más, se activó en mí unas alarmas de peligro, que me gritaban que corra o iba a morir.
Mi respiración se intensificaba cada vez que se acercaban más y comencé a correr.
Mientras corría entre la gente, el arquero de su grupo me dio una flecha imbuida en aura por la espalda.
Mi respiración comenzaba a hacerse cada vez más intensa y comencé a correr aún más.
*Sonidos de agitación*
Mierda, agh... ¿Por qué me pasa esto a mí? Maldita sea.
Tengo a tres tipos que me persiguen de noche por una ciudad en la que todos se apartan y me tienen miedo.
Me intentan cazar y han llegado a darme una flecha que tengo clavada en mí espalda, esto ha comenzado a doler demasiado, dios mío.
¿Acaso seré un fantasma?
No puede ser así, tengo forma humana, mis manos, mis piernas, todo mi cuerpo.
"¡Apúrense, rodeenlo! No dejen que el 'ente' escape".
Grita uno de los tres hombres que lo persiguen.
¿¿Un 'ente'?? Ya lo entiendo, he poseído el cuerpo de alguien y el color de mis ojos no son los de una persona normal, son blancos como los de un muerto, y este realmente no soy yo, debo separarme de este cuerpo y desaparecer antes de que me maten.
Dónde, dónde, piensa dónde puedo esconderme, rápido.
Giré mi cabeza hacia ambos lados en busca de una posibilidad y observé a lo lejos un callejón.
Me meteré por ese callejón y me separaré del cuerpo en cuanto cruce.
Vamos vamos, ya casi llego...
Eh... qué... Por qué... voy tan lento... mis piernas no las siento y estoy cayendo...
Comencé a cerrar mis ojos lentamente hasta quedar todo en negro.
'[Has muerto]'.
Salieron en letras gigantes delante de mí, como si de un videojuego se tratara.
"¿Es esto en serio? No tiene ningún tipo de sentido".
Indignado con la vida empecé a renegar.
"Aparezco de la nada en un mundo que apenas conozco, al lado de un cadáver, que parecía un cazador y resulta que soy un maldito fantasma tipo 'ente' y me terminan matando".
"No me lo pued-".
"[Comenzando transferencia de cuerpo de un mundo a otro]".
La voz de una mujer resonó en mi cabeza y delante de mis ojos apareció ese anuncio.
"¿Eh?".
[Javier Lenz 23%...]
"¡Oye espera! ¿Qué es lo que haces? ¿Quién eres? ¡¿Qué es esto de transferencia?!".
[Javier Lenz 78%...]
¡¡¡Por favor responde!!!
Grité con todas mis fuerzas, pero no recibí respuesta alguna.
[Javier Lenz 100%]
[Transferencia completa]
"¿Bien... y ahora?, ¿Qué se supone que haga?".
"[Comenzarás una nueva historia como Javier Lenz, buena suerte en tu aventura]".
Reaccioné con un tono de sátira de lo indignado que seguía con esto.
"Ohhhh vaaaaaya, una historia como yo en este mundo, qué interesante, pero, ¿Cuál es el punto-"?
Y en un parpadeo fui teletransportado de nuevo al mundo de cazadores y fantasmas.
"¿De esto...?". Quedé boquiabierto.
Estaba dentro de un gran auditorio que parecía un templo.
Y esta escena que estoy viviendo la conozco claramente, es el momento de la promoción de ingreso de los nuevos aprendices a la academia de cazadores, que aparece en la novela de mi mamá.
Si no mal recuerdo, había alrededor de 2000 cazadores recién ingresados y 10 cazadores profesionales entre toda esta multitud de miles de espectadores, que no eran cazadores.
En el que la mirada de todos los espectadores, fueron dirigidas a una sola persona, Erick Stein.
[Información de Erick Stein]
Como todos los cazadores aprendices que están aquí tiene 15 años, tiene un talento innato con la lanza, siendo esta su arma principal y su posición en el examen de ingreso a la academia es el N°1.
Al inicio de la novela, se explica quién es y de dónde viene, una historia bastante triste y un poco cliché cuando se trata de este tipo de historias.
En la que pierde a toda su familia por culpa de un fantasma tipo 'demonio', que el simple hecho de que aparezca es considerado, un fantasma clase: 'catástrofe'.
En el momento que se quedó solo y sin familia, un viejo lo adoptó, lo educó y entrenó para ser un gran cazador.
Erick se convirtió en alguien honesto, justo y trabajador, que no desperdiciaba su tiempo y lo dedicaba en ir a entrenar.
Y ese trabajo duro lo llevó al momento en el que estamos ahora, viendo cómo lo felicitan y lo alagan por ser el N°1 de esta promoción de recién ingresados.
«Bueno, ahora poniendo a un lado todo eso, me dejé llevar... lo importante ahora es, ¿Qué diablos hago aquí? y ¿Qué es de mi vida y por qué estoy vestido como cazador?, necesito irme rápido de aquí».
Me levanté y caminé por las gradas del auditorio, yendo en busca de la salida para irme del lugar, hasta que paré mis pasos al escuchar la voz de una mujer llamar por mi nombre.
"Oye Javier, ¿Ya te vas?, ¿No te vas a quedar a ver la entrega de premios?".
Me di la vuelta y al lado del lugar en el que estaba sentado, vi a una mujer con la vestimenta de los cazadores, sentada con un cabello color cobre que le llegaba hasta los hombros, su piel era blanca, me miraba con ojos de niña buena y tenía una estatura que me llegaría hasta el pecho aproximadamente.
Fingí que me dolía la barriga y le puse una excusa.
"Perdón, siento un dolor de barriga que me está matando y necesito ir a descansar".
Vi un estampado en su buzo de cuello de tortuga en el lado derecho de su pecho y tenía en letras doradas el nombre de 'Isabel D.'.
"Dios mío qué grave, siempre andas con esos problemas, tienes que irte a revisar en serio, pero bueno, cuídate, nos vemos mañana en las clases, no faltes".
No sé quién es Isabel, es la primera vez que la veo, no hay ninguna chica con su descripción y nombre en la novela.
"Si Jajaja, no faltaré, no te preocupes, cuídate".
Respondí con una sonrisa y nos despedimos mutuamente.
Di la vuelta rápidamente y salí del lugar.
Indagué en mis bolsillos y encontré la llave de mi apartamento con una etiqueta que decía '443'.
Según el número de tu llave es la posición en la que quedaste entre los cazadores recién ingresados, estoy dentro de la media, entre 2000 cazadores supongo que estoy bien.
«Aunque espera... Ahora que caigo, si tengo esta llave soy un cazador aprendiz, y eso solo lo puedo ser si tengo 15 años como todos los cazadores reunidos ahí y encima esa chica dijo que mañana no falte a clases...».
Corrí rápidamente hacia el edificio de dormitorios de la academia, y encontré un gran edificio rectangular que iba hacia arriba, parecido a un rascacielos que no podía ni llegar a ver los últimos edificios por las nubes, bajé la mirada y logré ver la entrada, por la cual pasé corriendo y vi una gran sala de recepción color blanca, con 4 grandes pilares que formaban un cuadro en el centro en el que habían muebles y alrededor del cuadrado habían varias sillas, y por ultimo más delante de los grandes pilares, había un ascensor en medio y al lado las escaleras.
Claramente iba a tomar el ascensor y no iba a subir las escaleras para llegar a mi piso, según en la historia, el edificio es mixto, los últimos pisos, los más altos, son los más lujosos y más grandes, lo más parecido a cuartos de hoteles de 5 estrellas en los que se encuentran los mejores aprendices, en mi caso, por mi rango será una habitación de hotel de 3 estrellas.
Lo pude corroborar cuando encontré mi habitación y abrí la puerta, le di un vistazo de arriba a abajo al apartamento, que no era ni pequeño ni grande, con lo necesario a mi parecer.
«No está mal, para alguien de mi rango pudo haber sido peor...
Bueno dejemos de pensar en eso».
Caminé directamente hacia la puerta del baño y la abrí.
Lo primero que hice al llegar al baño, fue mirarme en el espejo y quedé sorprendido.
Yo, Javier Lenz, que tenía 22 años a punto de terminar mi carrera universitaria, he rejuvenecido a mis 15, era como haber regresado en el tiempo, así como los demás que están ahí, yo también soy un aprendiz aquí.
Tengo también en mi buzo, estampado mi nombre y la inicial de mi apellido en el lado derecho de mi pecho, 'Javier L.'.
Entonces si no estoy mal...
Definitivamente como dijo Isabel, mañana tengo que ir a la academia, para la entrega de armas y aprender sobre los fantasmas...
Abrí la puerta del baño y salí, caminé hacia mi dormitorio y me acosté en mi cama rendido.
*Suspiro*
"Enserio, ¿Qué es esto?". Pregunté decepcionado.
"No es suficiente con haber perdido a casi toda mi familia, y lo único que me queda de ella, mi hermano menor, lo acabo de dejar solo, sino que ahora también me están obligando a pelear contra fantasmas".
"Hubiera preferido que me manden a una historia que sea de escuelita, en el que mi mayor preocupación sea que le guste a la famosa o callada del curso".
"La pasaría mal también, pero no como este infierno, en el que acabaré encontrando mi final".
"Parezco desquiciado hablando yo solo".
*Suspiro*
"[No se ponga triste joven Javier Lenz, no está desquiciado, estoy yo aquí para escucharlo]".
La voz de la mujer cuando morí como fantasma volvió a resonar en mi cabeza.
Abrí mis ojos, desconcertado, me senté en la cama, miré alrededor y no había nadie, pero igualmente respondí.
"¿Quién eres? ¿Tú me trajiste aquí?".
Solté mis palabras al aire, pareciendo que hablaba conmigo mismo.
"[No nos alteremos Javier, primero que nada, déjame presentarme.
Me llamo 'Liz' y solo soy una ayudante de la persona que te trajo aquí]".
"¿Una ayudante? ¿Con qué fin me trajeron aquí?".
"[Con el fin de ayudarte y que nos ayudes]".
"¿Qué? ¿Y por qué piensas que lo haría?".
Una vez que hice esa pregunta, se proyectó delante de mis ojos, la foto de mi familia que tenía mi mamá, enmarcado en su cuarto.
"[¿No te gustaría volver a esos tiempos? En el que todos juntos eran felices y vivir hasta que tus padres sean abuelos y olvidar la tristeza que pasas en este presente]".
Me quedé sin palabras, esta voz en mi cabeza llamada Liz, sabía todo de mí, hasta la foto que tenía mi mamá de la familia.
"¿Cómo puedes asegurarme que puedo volver a esos tiempos? Te advierto que no juegues conmigo poniendo delante la vida de mis padres".
Mis palabras eran pura fanfarronería, qué voy a poder hacer contra algo que no puedo ver.
"[¿No te es suficiente prueba que hayas sido trasladado a este mundo y rejuvenecido 7 años? Mi 'señor' puede hacer todo lo que quiera posible]".
"Supongo que estás hablando de algún tipo de divinidad, cuando te refieres a el 'señor'".
"[Estás en lo correcto Javier, ¿Qué piensas ahora, confías en nosotros?]".
"No, no confío, pero igual te escucharé, por el momento es lo único que puedo hacer".
"[Qué pena, te aseguro que irás ganando confianza en el futuro, pero por ahora ya que accediste a querer escucharme, te daré la misión que tendrás que cumplir para poder hacer tu deseo realidad]".
"Bueno, presto atención".
"[Suponiendo que leíste toda la historia, es simple, solo tienes que darle un final feliz a la obra]".
"Y suponiendo que tú también lo leíste, sabes que eso es algo casi imposible, ¿verdad?".
"[Lo sé...]".