Las paredes de la manada de Piel Negra estaban cubiertas de plantas trepadoras, haciendo que la manada pareciera pequeña y acogedora desde el exterior.
La fachada de la manada estaba decorada con céspedes bien recortados, deletreando el nombre de la manada.
Una enorme fuente se situaba en la entrada de la manada donde descansaban los hombres de seguridad. La fuente estaba diseñada como un lobo negro, con suficiente espacio en su interior para una cama y un baño, acomodando a cuatro guerreros.
Funcionaba tanto como puesto de seguridad como fuente, pero la característica más asombrosa era la gran cabeza esculpida de un lobo negro en la parte superior de la puerta, con agua fluyendo de su boca para conectarse a la fuente del puesto de seguridad.
Todo estaba pintado de negro con flores blancas alrededor. La manada completa era un marcado contraste con lo que habían visto hace seis meses.