—Raven no estaba segura de si debía ayudar a Alfa Lawn o a Alfa Denzel, pero ¿qué tipo de ayuda podría posiblemente ofrecer? Las manos de Alicia estaban ardiendo en rojo, y sin embargo, la pitón no mostraba señales de debilidad.
—Alfa Denzel intentó desviar la atención de la pitón de Alicia, pero sus esfuerzos fueron en vano. No había instrumentos afilados a la vista, y temía herir a Alicia si intentaba atacar físicamente a la pitón o transformarse.
—Esta no era una pitón ordinaria; era un espíritu. A Alfa Denzel le gustaba participar en batallas de ingenio con espíritus, pero este tomó una forma diferente antes de que pudiera comenzar.
—Fue completamente inesperado y deseó haber traído a Valerie con él. Sus poderes habrían sido de gran ayuda.
—¡Alicia, aléjate! —gritó, pero los ojos de Alicia permanecían cerrados, sus manos presionadas una contra la otra, quemándose tan intensamente que su piel se estaba desprendiendo.