—Bien. Llama a Burke y dile que atienda a Alicia —dijo Denzel.
Como Burke estaba al tanto de los poderes de Alicia y el hecho de que tenía que mantenerlo en secreto, Denzel estaba seguro de que él también sabría cómo manejar este asunto.
—Sí, Alfa —respondió Dorothy saliendo corriendo de la casa de la manada, y enseguida vio a Burke a cierta distancia. Comenzó a gritar:
— Beta Burke, Alicia.
Burke estaba perturbado, ya no sentía la emoción de la victoria:
— ¿Qué le pasó? ¿Dónde está?
Su corazón latía descontroladamente con miedo de lo que podría haberle pasado cuando se ofreció para ayudar en la casa segura.
—En su habitación, inconsciente —reveló Dorothy. Burke corrió a la habitación de Alicia, seguido por Godic y Dorothy mientras esta última le informaba:
— El Alfa dijo que debía llamarte para que la atendieras.
Burke se preguntaba cómo el Alfa Denzel ya sabía que Alicia no estaba bien antes que los demás en la manada.