—No lo saben, y es lo único que me hace sentir necesitada —la voz de Alicia estaba llorosa al final. Valerie se entristeció por el alcance al que Alicia llegaba para sentirse necesitada por su manada.
Alfa Denzel ya no estaba inclinado a permitirle tomar la decisión. —Ya no tienes que hacer esto —dijo de manera severa, pero Valerie preguntó,
—¿Puedes demostrarlo? —aún tenía curiosidad por saber cómo sucedía ya que nunca había visto algo así en toda su vida.
—¿Qué uso? —preguntó Alicia, no familiarizada con usar sus poderes cuando no había nada particular en qué utilizarlos.
—Úsame a mí —dijo Burke. Alicia no se rehusó. Lo miró fijamente, y sus ojos se desenfocaron como en un vínculo mental. Siguiendo la dirección de sus ojos, Burke fue levantado y cayó detrás de la silla en la que estaba sentado.
—Ay —gimió. Fue más doloroso de lo que pensaba, sin embargo, estaba feliz de que ella tuviera algo especial como esto.