—Alfa, lo siento, pero no es lo que piensas —suplicó el doctor. No era su lugar cuestionar lo que su Alfa le instruía hacer. El Alfa Denzel estaba visiblemente alterado.
Incluso en la ducha, podía escuchar todo lo que se decía en su habitación. El ruido del interior no podía escaparse ya que había insonorizado algunas de las habitaciones, pero eso excluía el cuarto de baño. En una situación donde tenía un peso extra en su habitación, no podía confiar completamente en que no soltaría una palabra.
Simplemente no esperaba que involucrara su relación con Valerie. Eso fue una falta de respeto grave, incluso si el doctor era mayor que él.
—¿Cómo te atreves a cuestionarla? —Cerró el grifo y se alejó de la puerta, acercándose a donde el doctor estaba sentado con Valerie. Incluso ella tenía miedo de la expresión del Alfa. El Alfa Denzel podía ser aterrador sin siquiera intentarlo.
—Yo…