Chai Xiyang se rió:
—No puedes conocerlo ahora porque está en el extranjero. En cuanto nos casemos mañana, inmediatamente arreglaremos para que vuelva.
—¿Casarnos mañana? —Qiao Ning se sorprendió—. ¿Podría estar sucediendo tan pronto?
—Sí, nos casamos mañana. ¡Ya no puedo esperar más! —dijo Chai Xiyang de manera asertiva.
Después de solo un momento de duda, Qiao Ning asintió:
—Está bien, haremos como dices.
Ya que había aceptado, realmente no importaba cuándo se casaran.
Sin embargo...
—Antes de casarnos, quiero conocer primero al Director Chen —pidió Qiao Ning, temiendo que pudiera malinterpretarlo, agregó:
— No puedo simplemente casarme contigo sin explicarle todo a él.
Aunque a Chai Xiyang no le gustaba la idea, sabía que tenía que respetar su decisión.
—Está bien, después de que lo conozcas mañana, ¡nos casaremos! Pero ahora, tenemos que volver y contarle a mi padre sobre esto —Chai Xiyang parecía resuelto.
