Fu Chun no esperaba tal resultado y quedó atónito.
Pensó que Fang Yi lo había llamado solo para hacer un trato con él. Si ella quería dinero o algo más, se lo daría.
Sin embargo, no esperaba que Fang Yi no quisiera nada.
Si ese fuera el caso, ¿por qué le había pedido encontrarse con él?
Fu Chun no pudo evitar fruncir el ceño. Su tono se volvió cauteloso y ni siquiera se atrevió a quejarse del lento tratamiento que acababa de recibir. —¿Tienes alguna petición especial?
Su tono era tan humilde que incluso su forma de dirigirse había cambiado.
Fang Yi bajó la mirada y negó con la cabeza. —No, lo siento. Quería decirle que no intentara verme a través de otros canales porque en el departamento especial, todo tiene que seguir las reglas.
Esta vez, Fu Chun finalmente vio la seriedad de Fang Yi. Se levantó de golpe, furioso. —¡Tú...!
¡Esto era una humillación total!
