La muerte del general TIACAUH trae una luz de esperanza en la batalla tras la derrota del primer general jaguar MALEKIN; por el cansancio queda inconsciente y es ayudado por sus compañeros. Ahora nos dirigimos a la pelea de REX y ELENA; veamos qué nuevas habilidades se aprecian en esta pelea.
Continuando donde nos quedamos, REX y ELENA están al margen; el general PAINALLI los está tomando en serio por las habilidades de ELENA. REX decide hacer su movimiento atacando velozmente al general, pero sin ningún problema el general esquiva todos sus ataques. ELENA, torpemente, lanza bolas de fuego y PAINALLI no tiene problemas para esquivar, mientras golpea repetidas veces a REX. Rápidamente, REX, sin ninguna contemplación por sus aliados, libera su poder y se convierte en un lobo blanco gigante, pero esto era solo un blanco más grande para PAINALLI. Después de unos segundos, tras una intensa pelea y dañando tanto a aliados como enemigos, ELENA, que se encontraba a una distancia prudente, grita algo a REX.
ELENA: ¡REX, EL HECHIZO YA ESTÁ COMPLETO, ACÉRCATE!
REX rápidamente se encoge y se pone delante de ELENA e inmediatamente ELENA apunta su bastón a REX y una especie de rayos golpea a REX, provocando una transformación. Poco a poco vemos cómo REX se empieza a transformar en una especie de humanoide, como si de un hombre lobo se tratara. PAINALLI mira sorprendido y REX, mirando su nueva forma, solo sonríe. Sin ningún aviso, rápidamente arremete contra el general y él a duras penas logra esquivar el ataque de REX. Rápidamente, REX no tiene piedad y ataca sin descanso al general y, en uno de sus ataques, logra golpearlo con una patada, levantándolo un poco en el aire y con su boca le muerde un brazo y lo lanza contra los árboles y, a la vez, logra tumbar a varios enemigos, deshaciéndose en el proceso de más de 15 guerreros jaguares y ELENA mira sorprendida y cansada a REX por la fuerza que consiguió con ese poder. De la nada, el general sale caminando de los escombros de los árboles y se dirige hacia nuestros amigos.
PAINALLI: (sacudiéndose la ropa) Quién iba a pensar que te volverías tan fuerte, pero esa transformación es molesta; sabía que tenía que matar a esa mujer.
REX: Sí que eres resistente (mira a Elena). ¿Estás bien?, ¿puedes continuar?
ELENA: Ese poder me costó mucho maná; estoy un poco cansada.
PAINALLI: Mujer, ¿Cómo se llama? Esa magia desafía toda lógica.
ELENA: (sudando) Lo llamo "trasmutación"; evoluciona a todas las especies a su mejor forma por unos minutos.
REX: ELENA, ¿por qué le dices?
ELENA: (agitada) No hace gran diferencia si lo sabe o no; solo acaba con él… ya no me quedan muchas fuerzas.
REX: En eso tienes razón.
PAINALLI: (Se truena el cuello) Bien, iré tras tuyo, mujer; eso es lo que debí hacer al inicio.
Rápidamente, PAINALLI acelera rompiendo la velocidad del sonido y REX logra interceptar su patada que ya estaba cerca de la cara de ELENA. Rápidamente, REX, en su forma humanoide, le planta pelea a PAINALLI; los dos se mueven y golpean a una velocidad fuera de lo normal. ELENA intenta dar apoyo, pero está muy cansada. En su desesperación, A REX se le ocurre activar su forma de lobo gigante con esa forma actual, logrando aumentar su tamaño un poco y su fuerza crece, dando problemas a PAINALLI, el cual ahora, más serio, retrocede, ganando espacio entre él y REX, el cual se pregunta por qué retrocede. PAINALLI, mirando seriamente a REX, lanza una patada al aire tirando una especie de cuchilla voladora hecha por la presión y fuerza de PAINALLI, un corte volador sin espada; gracias a las garras que tenía PAINALLI, esto era posible.
Un poco incrédulo por lo que vio, esquiva el ataque a duras penas y PAINALLI aprovecha para atacar a ELENA, la cual usa su teletransportación para esquivar y alejarse de PAINALLI. Ya frustrado y desesperado, PAINALLI empieza a enfurecer y lo vemos rabiando.
PAINALLI: (molesto) GR… ¡MALDICIÓN, MALDITOS MORTALES! Ya estoy cansado de esto; ahora le pondré fin.
Luego de estas palabras, PAINALLI empieza a ancharse un poco, ganando mucho músculo, y sus garras empiezan a crecer y se pone un poco más grande. Rápidamente ataca a ELENA y vemos que su velocidad había bajado un poco, pero igual seguía siendo rápido para todos. REX va corriendo a detenerlo, pero poco a poco se le ve cansado porque no estaba acostumbrado a esa forma que tenía. ELENA crea una especie de barrera a su alrededor para cubrirse de los ataques de PAINALLI, el cual golpea con furia la barrera de ELENA y a la vez tira cortes voladores para retener a REX para que no se acercara.
Vemos que ELENA está sufriendo para mantener su barrera y REX intenta acercarse esquivando los ataques de PAINALLI. En un ataque del general, logra impactar directamente a REX, el cual recibe un gran corte y es expulsado hacia atrás, golpeándose contra los enemigos y estrellándose contra un gran árbol.
PAINALLI, al ver esto, deja a ELENA y corre a rematar a REX, el cual está levantándose a duras penas del golpe. REX mira cómo PAINALLI va directamente hacia él e intenta pararse rápido, pero por el daño no lo logra. Vemos cómo poco a poco PAINALLI estira su mano en forma de una lanza para atravesar a REX y justo cuando va a clavar su mano en el pecho de REX, es detenido de golpe y vemos cómo es retenido por unas cadenas de hielo. Vemos cómo ELENA se había teletransportado cerca de REX para activar sus hechizos más poderosos "cadenas de hielo". PAINALLI intenta liberarse, pero cuando intenta moverse, resbala y cae. Vemos que el piso bajo él está cubierto por hielo y no podía pararse.
PAINALLI: Maldición, subestime a esta mujer. ¿Quién rayos le dio todo este poder?
REX: Jajaja, oye, gato (mirada seria), se acabó.
Rápidamente, REX libera su poder de lobo blanco gigante y su forma humanoide se vuelve más imponente y mira a PAINALLI diciéndole: "A ver cómo era". Después de esas palabras, REX concentra en su pie su energía y lanza la misma técnica que PAINALLI, lanzando un gran corte volador de su pierna, sorprendiendo a PAINALLI y recibiendo el golpe directo y lastimándolo muy gravemente. PAINALLI, sangrando por la boca, maldice a REX, pero rápidamente siente un gran poder y, al voltear, mira a ELENA conjurando un poder parecido al de cierto anciano, pues del cielo un gran meteoro está cayendo.
REX: (apenado) ELENA, ¿no crees que te pasaste un poquito?
ELENA: Tú crees, jeje.
REX vuelve a su forma original y solo aumenta de tamaño y agarra a ELENA y se la lleva mientras se están yendo. PAINALLI, desesperado, intenta romper esas cadenas, pero no lo lograba ya que estaban imbuidas con una especie de magia muy poderosa.
PAINALLI: (en su mente) ¿Qué rayos? Esa mortal no debería tener tal poder. ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Quién rayos la entrenó?
Rápidamente, los soldados aliados que sobrevivieron retroceden y se ponen en la entrada de la ciudad, mientras REX y ELENA también se ponen en la puerta de la ciudad y ELENA, ya con dificultad, levanta un último escudo para aguantar la onda expansiva del meteoro y vemos como el meteoro cae directamente encima del general PAINALLI y vemos como grita de la desesperación.
PAINALLI: ¡¡¡¡NOOOOOO!!!!
Vemos cómo los enemigos también son arrastrados por la expansión a pesar de que intentaron correr; también vemos cómo la expansión de la explosión retumba sobre todo el campo de batalla. DANTE e ISAMU se cubren mientras pelean; el ruido despierta a MALEKIN, y también QUETZALCOATL se cubre y ELENA logran detener la expansión y la puerta que cuidaban queda intacta gracias a la barrera de ELENA.
Después de la explosión vemos cómo no quedó ningún enemigo en el campo de batalla donde estaban REX y ELENA y todo el campo de batalla donde estaban había sido reducido a una llanura sin vida. Esta batalla había acabado y los ganadores son REX y ELENA, los cuales están sentados en el suelo por el cansancio, pero felices por el final de esta batalla.
Ahora vamos con la última pelea de Quetzalcóatl. Tras aguantar la explosión, mira cómo su enemigo CHIKAUAK está volviendo corriendo para acabar con esta pelea después de haber sido mandado a volar por Quetzalcóatl. Mientras corre, tumba a todos los que se interponían en su camino, tanto aliados como enemigos; estaba en un frenesí de locura. Quetzalcóatl lo intercepta con una patada que rebota en su pecho y retrocede. Se da cuenta de que este general había incrementado su resistencia y su fuerza. Rápidamente, Quetzalcóatl retrocede para tomar distancia.
QUETZALCÓATL: (en su mente) Este bastardo se ha vuelto muy poderoso; no quería recurrir a trucos, pero no tengo otra opción.
GENERAL CHIKAUAK: (furioso) ¡OYE, QUETZALCOATL! Porque escapas de mí, ¿no querías una pelea? ¿O estás tan débil que no puedes conmigo? Jajaja.
QUETZALCÓATL: Muchos, hablas, ga...ti...to.
El general enfurecido se lanza corriendo hacia Quetzalcóatl y cuando ya está a centímetros de ella, la diosa logra crear un pequeño tornado que levanta al general CHIKAUAK unos momentos en el aire, lo cual Quetzalcóatl aprovecha para lanzarle una fuerte patada con sus dos piernas, sacándolo volando otra vez con dirección al bosque, lo cual Quetzalcóatl rápidamente lo persigue y en el camino, con aire cortante, va matando a varios enemigos para ayudar a su grupo. Ya en el bosque, Quetzalcóatl y el general CHIKAUAK están solos.
GENERAL CHIKAUAK: (furioso) ¿Qué te pasa, mujer? ¿Tan desesperada estás que me mandas a volar a cada rato? Igual esto no te salvará, lo sabes, ¿no?
QUETZALCÓATL: Grandote, esto no durará mucho. (Tono de voz burlón) Ven a mi, michito, michito.
Esto colma la paciencia de CHIKAUAK, que arremete furioso e intenta golpear a Quetzalcóatl y, a la vez, la diosa está alejando al general de sus tropas, adentrándolo más en el bosque. Luego de un rato de persecución, vemos que Quetzalcóatl se detiene y usa aire cortante para tratar de frenar al general, lo cual, por el dolor, se frena un poco y se para.
GENERAL CHIKAUAK: (furioso) Maldición, todo este tiempo huyendo y solo puedes hacer eso, maldito Quetzalcóatl, no mereces seguir viviendo; ahora morirás.
QUETZALCÓATL: Bien musculoso, sin cerebro. Ya estamos lo suficientemente lejos; aquí no habrá problemas.
El general, sorprendido por las declaraciones de Quetzalcóatl, solo mira incrédulo porque no sabe qué le hace decir esas cosas a Quetzalcóatl, más con la confianza que lo dice. Ya sin más, decide matar de una vez a Quetzalcóatl, pero de repente ve que la diosa hace un silbido muy fuerte que daña un poco sus oídos y empieza a hablar en un lenguaje raro que parecían ruidos de serpientes. De repente, la tierra empieza a temblar y del suelo se alzan dos enormes serpientes de aproximadamente 20 metros y se colocan en la espalda de Quetzalcóatl y miran intimidantemente a CHIKAUAK, el cual solo mira sorprendido este suceso.
GENERAL CHIKAUAK: (sudando) ¿Qué rayos es esto, mujer? Pensé que pelearíamos limpiamente.
QUETZALCÓATL: ¿Eres estúpido?, o te haces. Ustedes me debilitaron; ahora usaré mis otras habilidades, prepárate.
Rápidamente, las dos serpientes intentan atacar al general, el cual esquiva las mordeduras, golpea a la serpiente, pero su piel es muy dura y no le queda más que retroceder. Se está llevando a cabo una pelea de pegar y esquivar de parte del general hacia las serpientes, mientras que Quetzalcóatl está corriendo atrás de las serpientes para mantener alejado al general. En su mente, el general sabe que tiene que matar a Quetzalcóatl para que estas abominaciones de serpientes se retiren porque Quetzalcóatl las está controlando.
Rápidamente logra darle un buen golpe en la mandíbula a una de las serpientes que la hace retroceder y el general ve como la primera serpiente que tumbó golpea al caer a la otra y la desestabiliza. Rápidamente aprovecha esa oportunidad para ir tras Quetzalcóatl, la cual estaba viendo sorprendida cómo las serpientes caían. Sin más, el general atraviesa el cuerpo de Quetzalcóatl con una de sus manos y lo levanta y se pone a reír como loco al ver el cuerpo de Quetzalcóatl atravesado y sangrando. Mientras reía como lunático, siente un dolor inmenso en su pecho y al bajar la mirada ve que la serpiente lo tiene en su boca atravesado por sus colmillos y desesperado mira el cuerpo de Quetzalcóatl que tenía en sus manos, pero resulta que todo había sido una ilusión de Quetzalcóatl; nunca la atravesó y nunca golpeó a las serpientes. Agonizando en la boca de la serpiente, mira que en la sima de un árbol estaba Quetzalcóatl mirándolo. Desesperado, grita su nombre mientras la serpiente lo devora:
QUETZALCÓATL: (suspiro) Pensar que tuve que usar todos mis trucos, esto es caer demasiado bajo, pero bueno, se acabó. Odio decirlo, pero en una lucha cuerpo a cuerpo en mi estado actual, él me hubiera ganado.
Esta lucha ha acabado; el ganador es Quetzalcóatl. Las serpientes regresan bajo tierra y los amigos proceden a llamarse telepáticamente gracias a la habilidad de ELENA y comunican a todo el mundo que la ciudad está a salvo. Todos se alegran y el alcalde también se siente más tranquilo luego de recibir la noticia. Ahora nos vamos al campo principal donde se encuentran DANTE e ISAMU, los cuales ya han acabado con todos los guerreros jaguares que ahí se encontraban, y vemos cómo DANTE mira con odio a su principal enemigo, MIJAIL.
MIJAIL PETROV: Esas cosas no sirven para nada, pensar que ni te hicieron cansar, qué desgracia.
DANTE HERALDI: (mirada de odio) Te juro que te mataré hijo de perra.
La guerra en los campos de batalla está llegando a su fin, ¿Qué final le espera a este par de personas que se odian mutuamente? Muy pronto lo sabremos.