Parte 8: La caída de un reino
Habiendo aceptado enseñarle a cultivar, Alvina tomo un núcleo de elemento luz de su bolso.
Después de esto, Alvina le dijo a Johann "Te impartiré mi conocimiento sobre el cultivo del elemento luz"
"Esto que tengo en mi mano es un núcleo elemental, el cual es similar al que quitaste de esos demonios. Este núcleo proviene de un demonio de luz."
"¿Hay otros tipos de demonios?" preguntó Johann con confusión.
Asintiendo, dijo "Sí, existen demonios de todos los elementos. Estos demonios que mate hace un rato eran demonios de la muerte. Estos demonios son los más agresivos, y se cultivan al realizar masacres" respondió con un rostro serio.
Johann se asustó al enterarse de eso. Y pensar que estos demonios se volverían más poderoso al masacrar.
"Ahora, utilizaré este núcleo elemental de luz para crear un núcleo de cultivo de luz. Se dice que este núcleo de cultivo es una extensión de la conciencia de dios, pero nadie sabe la verdad. Solo sabemos que sé crear a partir de unas reliquias muy preciosas, de las cuales estoy en posesión de 3 de diferentes elementos, Luz, fuego y tierra."
"¡Increíble!" con ojos brillantes, Johann exclamo con incredulidad. Y pensar que dios realmente existía.
Con esto dicho, Alvina comenzó con el refinado del núcleo, mientras el expectante Johann se quedó mirando con mucho interés aquella deslumbrante luz.
Un par de minutos después, Alvina finalmente termino con el refinado. El núcleo elemental, una vez del tamaño de medio puño, se redujo a tan solo el tamaño de un pulgar.
"Aquí tienes. Debes ingerirlo directamente, y no pasará mucho antes de que el núcleo de cultivo se fusione con tu cuerpo espiritual."
Aunque Johann seguía asustado por la idea de comerse eso, aun así termino asintiendo. Mirando el núcleo de cultivo en su mano, apretó los dientes, y con un impulso de valentía se tragó el núcleo de cultivo rápidamente.
Unos segundos después, Johann sintió un fuerte ardor en su garganta, seguido a eso, sintió como su conciencia se nublaba, y después de tambalearse unos momentos, termino desmayándose.
Unos minutos después, Johann sé despertó. Unos segundos después, comenzó a buscar alrededor para encontrar a Alvina, pero para su sorpresa no la encontró por ningún lado.
Unos momentos después de notar esto, inmediatamente pudo notar una extraña pantalla de luz plasmada dentro de su conciencia.
Dentro de esa pantalla de luz había varios números y letras. Incluso sin saber leer, Johann pudo entender el significado de aquellos textos.
Un sonido de notificación sonó dentro de su mente, y seguido a esto apareció un mensaje destacado en su conciencia.
Ding… Sistema de dios activado.
Ding… Felicidades por obtener el [núcleo de cultivo de elemento luz].
Ding… Has desbloqueado 3 caminos de cultivo de luz.
Ding… Seleccione uno camino de cultivo para comenzar. Una vez seleccionado, le será imposible cambiarlo en el futuro.
(Caballero: Poseen un cuerpo resistente y grandes capacidades físicas. Se especializan en Armas. Puede ser evolucionado)
(Sacerdote: Poseen abundantes hechizos de infusión de poderes de curativos, restricciones y mejoras beneficiosas. Se especializan en soporte. Puede ser evolucionado)
(Mago: Poseen en variedad de hechizos dañinos y de largo alcanzó. Se especializa hechizos de alto coste y gran impacto. Puede ser evolucionado)
Johann se quedó aturdido por un momento, pero no tardo en darse cuenta de que estos textos en su mente era aquella "conciencia de dios" que le dijo Alvina.
"Que extraño que es esto. Pero creo que tengo que elegir uno de aquellos." Dijo Johann sin saber como reaccionar.
Poco después, se puso a pensar en la elección que le pedía el sistema. "Me gustaría ser como Alvina, y ella usaba armas, por lo que debería ser un caballero. Quiero seguir sus pasos, así que elegiré Caballero."
Pero poco después llego una pregunta a Johann. "¿Pero como elijo lo que quiero?"
Después de preguntarse eso, intento decirlo en voz alta, pero nada. Después, intento concentrarse en el botón que decía "Caballero" y para su sorpresa, funciono.
Al momento de seleccionar esa opción, Johann pudo sentirse algo mareado, mientras que el sistema dio una notificación.
Seleccionado Caballero. Comenzando el tallado de sellos espirituales… Tiempo estimado para su finalización: 1 día.
Viendo esto, Johann se alegró. Pero después de pensar en esto, decidió que era peligroso quedarse allí, y a pesar de su mareo, fue a donde dejo su gran carroza. Llegando allí, la tomo y volvió a su camino hacia la zona segura.
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Alvina era una de las encarnaciones que Malbrien dejo atrás. Estas llevaban una parte de su conciencia, por lo tanto, pudieron comunicarse con los demonios y ordenarles.
Después de terminar con Johann, decidió que era hora de comenzar con el plan. Los números de los demonios alcanzo algo bastante aceptable, por lo que ahora pueden comenzar con la gran cosecha de vidas.
"Las razas inteligentes parecieron darse cuenta del peligro que representan mis demonios" Pensó la conciencia de Malbrien dentro de todas sus encarnaciones.
"Creo que ya viene siendo hora de mostrarle al mundo el verdadero peligro que representan los demonios". Poco después, emitió una orden a todos sus generales.
"Biganos y Salamander, ustedes 2 irán a destruir el reino humano de Ensphia en el norte. Mabell, tú iras solas al reino de los Seption, Ecruidsall, al oeste. Abalrose y Ramza destruirán el reino orco de Torrezog. Y por último, Capridoyle y Nuarice destruirán el reino de los Folares Vlinard, al sur"
En el instante en que Malbrien dio su orden, se movilizaron cientos y miles de demonios en 4 direcciones, trayendo el caos en los territorios.
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Lloyd era un comandante del ejército del reino humano de Ensphia. En los últimos meses, estuvo realizando mucho trabajo, mucho más que en guerras anteriores, ya que la presencia de estos demonios por todos lados eran un verdadero problema.
"Sinclair, ¿cómo va la situación en el sur?" pregunto Lloyd al capitán cerca de él.
"Comandante Sinclair, hemos perdido 4 compañías tratando de defender el sur, pero solo hemos podido proteger un pueblo mediano, y perdido dos tercios del sur…"
Frunciendo el ceño, Lloyd asintió con la cabeza y dijo "Capitán Lester y el capitán Nik enviaran sus compañías para ayudar en la defensa sur, en cuanto al este, el norte se encargara de reforzar sus defensas."
"¡Entendido!" respondieron los capitanes mencionados. Luego, comenzaron a discutir sobre la falta de recursos en algunas zonas. La perdida de territorio junto con desplegar forzosamente todo el ejército para defenderse trajo graves consecuencias con el alimento.
Ahora mismo hay una seria escasez de alimentos en el reino, por lo que no sería raro tratar este tema con urgencia.
En este momento, sin embargo, un militar entro de un golpe en la sala con una expresión de desesperación en su rostro. Viendo a los altos mandos grito a todo pulmón "¡SEÑORES, LOS EXPLORADORES AVISTARON UN EJÉRCITO DE DEMONIOS MARCHANDO EN DIRECCIÓN A LA CIUDAD CAPITAL! ¡LOS EXPLORADORES ESTIMAN QUE SON CERCA DE 900 DEMONIOS, LA MITAD SON LOS GIGANTES DE TIERRA Y LOS OTROS SON UNOS ENORMES REPTILES COLOR ROJO!"
Los militares se levantaron de golpe de sus asientos mientras llenaban de preguntas al oficial. Lloyd pregunto seriamente con sus cejas muy arrugadas "¿Se confirmó esto? ¿Ya les informaron a los altos mandos?"
"Si mi señor, ahora mismo hay una orden de los superiores para desplegar todas las defensas con máxima prioridad"
Entendiendo sus órdenes, todos los militares salieron con apuro, y comenzaron a pasar órdenes en cadena.
Mientras tanto, en la puerta sur se podía ver un masivo número de soldados defendiendo sobre los muros y detrás de la entrada. En este momento, llego Lloyd a la cima del muro, y pudo ver en la distancia un gran número de demonios marrones y rojos marchando lentamente en su dirección.
En el momento en que vio esto, empezó a sudar profundamente. En casos anteriores apenas se habían encontrado grupos de 10 a 20, y aun así sufrían cientos de bajas. Pero en este momento, había casi 1000 demonios juntos, lo que le hizo desesperar.
Por otra parte, debido a su posición en el ejército, no podía irse aunque quisiera, por lo que empezó a gritar órdenes y a preparar las defensas del muro.
Mientras tanto, otro oficial vino a informarle "Comandante Lloyd, Los exploradores descubrieron muchos otros demonios rodeando la ciudad, parecen estar tendiendo una emboscada." Dijo el oficial con tristeza escrita en su rostro.
En este punto, Lloyd se dio cuenta de que esto era un ultimátum, o ganaban o morían.
Los demonios no estaban muy lejos de la puerta, y en ese momento se detuvieron todos, como su estuviesen organizados. Lloyd pudo distinguir en la distancia un gigante mucho más grande que los demás, este media alrededor de 8 metros de alto, mientras que los demás apenas median de 3 a 5 metros. Poco después un reptil impresionantemente largo salió de la multitud y rápidamente se destacó debido a que todo a su alrededor parecía estar quemándose y secándose rápidamente. Este reptil rojo tenía una longitud de 14 metros, y el aire a su alrededor parecía distorsionarse violentamente.
Lloyd pudo sentir miedo surgir de él al ver a estos 2 monstruosos seres. Pero antes de que pudiese retomar su calma, todos los demonios se lanzaron hacia delante a una velocidad alucinante, desesperando a todos los soldados.
Los oficiales en el muro inmediatamente gritaron sus órdenes a toda voz, y los arqueros empezaron a lazar flechas, pero fue en vano, ya que todas ellas simplemente rebotaban en sus pieles.
Las catapultas lanzaron gigantescas rocas hacia los demonios y pudieron derribar a los demonios con los que chocaba, pero aun así apenas ocasionaron leves daños sobre ellos, y ninguno murió.
No tomo mucho tiempo para los demonios llegar cerca del muro. Cuando los soldados esperaban que los demonios se detuviesen al llegar a la fosa enfrente del muro, el gigante de 8 metros dio un terrible puñetazo al suelo, haciendo que un terremoto azotase el suelo y los muros, un instante después, el suelo comenzó a levantarse, formando un camino recto a la cima del muro.
Esta escena dejó a todos los humanos en la muralla completamente aturdidos, pero después desesperaron y algunos comenzaron a correr para intentar escapar. Los reptiles fueron más rápidos que los gigantes, llegando rápidamente a la cima del muro y comenzaron a atacar a los humanos y asesinándolos de un golpe.
Entre esos reptiles, estaba el reptil gigante de 14 metros. En el momento en que fijo su mirada sobre unos humanos, un intenso fuego comenzó a emanar de su cuerpo, y el reptil cargo más veloz que una flecha hacia los lugares más poblados. El fuego en su cuerpo se extendió a varios metros a su alrededor, y por donde sea que el reptil gigante pasaba, se podía encontrar cadáveres calcinados en el suelo.
Lloyd estaba más allá de la desesperación al presenciar estos eventos. Aun abrumado por el shock, no se dio cuenta de que un reptil rojo se dirigía en su dirección, y antes de que pudiese reaccionar, perdió su conocimiento al tener su cabeza despedazada.
Carne y sangre volaron por los cielos mientras los demonios devoraban la vida de miles de humanos, dejando un baño de sangre en el suelo.
Esta terrible masacre en los muros duro por casi una hora antes de que todos los humanos allí estuviesen muertos. Como todo el ejército pereció, los demonios desenfrenados invadieron la ciudad, produciendo la más grande de las masacres en la historia de ese mundo…
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El general Elías estaba dando instrucciones a los demás oficiales del ejército, organizando sus deberes y distribuciones.
La estrategia de reconocimiento y defensas concentradas parecía estar dando frutos, al reducir las bajas de forma considerable mientras aún permanecía el uso de las zonas de cultivo exteriores disponibles.
Pero pronto, ese sentimiento de seguridad se desplomó al escuchar las últimas noticias. "Todo un reino… cientos de miles de vidas se perdieron…" Elías estaba desesperado por la noticia. Esto fue horrible. La población en las ciudades tienden a llegar alrededor de los 300 mil habitantes, pero casi todos ellos fueron masacrados por estas bestias mutantes.
No fue solo Elías quien desespero ante esta terrible noticia, la caída de un reino no era algo común. Hubo muy pocos casos en los que ocurrió, y las vidas perdidas nunca fueron tan grandes, por lo que la trágica masacre de esta ocasión no tuvo precedentes.
"Pero… ¿qué más podemos hacer? Si centramos la población en la ciudad se sufrirá una terrible hambruna, y tampoco asegurara la seguridad, ya que el reino de Ensphia tomaron esa ruta para tratar la situación y aun así todo su reino pereció…"
El día de hoy, mientras todos los altos mandos que recibieron las noticias se ahogaban en su desesperación, Johann y Alvina finalmente llegaron a la zona segura para entregar los suministros.