Chereads / EL IMPERECEDERO BRILLO DE LA LUNA SE FORTALECE EN UN NUEVO MUNDO / Chapter 5 - CAPÍTULO 4: LUCÍA, LA REINA FANTASMA

Chapter 5 - CAPÍTULO 4: LUCÍA, LA REINA FANTASMA

Por lo visto, las paredes de mi habitación están pintadas en un tono blanco puro. La luz natural fluye a través de las amplias ventanas, que están enmarcadas con cortinas blancas que dejan entrar la luz del día de manera sutil. El suelo está cubierto por una alfombra mullida de color rosado pastel, proporcionando una sensación de calidez y comodidad.

La cama ocupa el centro de la habitación, vestida con sábanas y edredones de algodón en colores pastel como el lavanda o el melocotón. Cojines decorativos en tonos coordinados se amontonan en la cabecera, agregando un cierto toque elegante. Un dosel ligero se extiende sobre la cama, creando un rincón muy acogedor.

El mobiliario es blanco y delicado, con detalles femeninos. Un tocador elegante con un espejo ovalado refleja la luz suavemente, a su vez, hay una cómoda con intrincados detalles tallados sobre esta. Una pequeña área de estudio cuenta con una mesa blanca y una silla, perfecta para momentos de concentración y creatividad.

En las esquinas, macetas con flores frescas añaden un toque de naturaleza y frescura. En las paredes, hay cuadros de paisajes místicos que completan la decoración, creando un ambiente sereno y acogedor. En general, la habitación emana una atmósfera de calma y elegancia, diseñada para ser el refugio perfecto para una joven en un castillo.

Al contemplar la belleza de este cuarto, me pregunto si realmente estamos en el castillo del Rey Lich, no creí que fuese posible encontrar un lugar como este, me imaginaba que seria un lugar oscuro y tenebroso... 

Tras un ligero momento de contemplación, Lilia se tira a la cama sin pensarlo 2 veces, termina  con la parte superior de su cuerpo tumbada en la cama y sus piernas subiendo de abajo hacia arriba con un ligero 'puff' cada que choca con la cama.

—¡Que agotador! Estoy tan cansada ¿Tú no, Mizuki? —Mientras dice eso, hace lado para que me siente junto a ella. 

— Si, fue un día agotador, en especial la parte antes de ingresar a la sala del Rey Lich, aunque nunca espere que me persiguiera un Dullahan tan pronto en la historia... ¿De qué nivel era?

 —¿Creo que era de nivel 6,200?

—¡¿Nivel 6,700 y aún así no nos alcanzó?! —¡¿Cómo es eso posible?!

 —Oh, no te preocupes por eso, Sia se estaba conteniendo, si hubiese querido, te habría matado antes de que siquiera pudiese decir algo.

—¿Por qué estaba conteniéndose?

— Fue mi madre quien se lo ordenó, Lucia, la dama fantasma — Suspira con resignación

—Desde pequeña, mi madre y mis hermanos me han molestado, pero no hay nada que pueda hacer... —Silencio incomodo.

— ¿Has tratado de decirle algo a tu padre? —Lilia toma una almohada cubriendo su boca, suela un grito ahogado de frustración.

— ¡Ya le he dicho pero no puede hacer nada! Cuando... Cuando mi padre está, mi madre se comporta como una santa ¡Pero no es así! Pero bueno, ya me rendí, además, el resto de gente me trata muy bien, por eso Sia se contuvo, aunque mi madre luego le regañe... Por eso mi padre igual te dio su bendición, con su bendición los No-muertos se la pensarán 2 veces antes de hacerte algo, matar al heredero de una bendición es un pecado muy grave.

— Es así...

 — ¡Si! ¡Así que no te preocupes! Además ¡Nadie te hará daño si estoy junto a ti!— Dice mientras se infla el pecho.

— Gracias, Lilia. — Tras esto, me acuesto en la cama, creo que sorprendí a Lilia porque se sonrojo ligeramente, por lo que aproveché en abrazarla.

— ¿Mi-Mi- ¡¿Mizuki?! — Estaba verdaderamente alterada por lo que hice, pero, no me importa, es mi primer amiga en este nuevo mundo así que está bien ¿No? Lentamente siento como el sueño se va apoderando de mi y me duermo.

Mientras tanto Lilia se quedó todo el rato junto a Mizuki, avergonzada, pero hasta cierto punto, no quería que acabe, en la cabeza de ambas estaba "Mi primera amiga".

Tras unas horas de sueño, Mizuki finalmente empieza a despertar, no obstante, una sensación suave estaba en su mano 'chuff' 'chuff', algo apretaba

— ¿Sua~ve? —Siento algo suave en mi mano ¿Qué es? Lentamente alzo mi cabeza observando lo que sentía, pero me detengo al ver a una Lilia roja cual tomate.

—¡L-Lo siento mucho! ¡N-No era mi intención Lilia— ¡Cielos! ¡¿Enserio Mizuki, tuviste que hacer eso?! ¡Creí que solo pasaba en los mangas!

Pasó un tiempo y Lilia seguía igual.

— Este... ¿Lilia? ¿Estás bien?¡Tierra llamando a Lilia! — ¿Será que Lilia.exe dejó de funcionar?

—N-No te preocupes...

Después de un rato, fue lo único que dijo Lilia, aunque seguía roja. De repente, alguien comenzó a tocar la puerta.

—Disculpe, ¿Esta es la habitación de la señorita Mizuki?

Era el lenguaje de los No-muertos, ¿Quién será?

— ¡S-Si?

— Su majestad solicita una audiencia en la sala de pociones. — ¿Esperó a que descanse? Por cierto, ¿Qué hora será? Se me olvidaba acá el tiempo no es muy preciso...

—¡Entiendo, voy en camino!

— Se lo comunicaré a su majestad.

Después de eso, el ruido cesó y Lilia volvió a la normalidad, bueno, hasta cierto punto.

— Lilia, ¿Puedes guiarme a la sala de pociones?

— S-Seguro, Mizuki.

Aún se ve ligeramente sonrojada, pero al menos se mueve con más naturalidad y no como un robot todo tieso, que linda.

Al llegar a la sala de pociones la puerta de ébano se abrió con un sonido inquietante, revelando un pasillo que parecía extenderse hacia una infinita oscuridad. Antorchas esmeralda destellaban, arrojando destellos mortecinos en la entrada.

La habitación estaba en penumbra, velas negras, suspendidas en el aire por una magia antigua, emitían un resplandor verdoso que danzaba de manera inquietante. Las sombras jugaban en las esquinas, creando una atmósfera lúgubre y tenebrosa.

Mesas de piedra sólida, talladas con símbolos ominosos, albergaban frascos y botellas de variadas formas y tamaños. Aquí reposaban ingredientes como huesos de criaturas místicas, esencias de no-muertos y líquidos extraños. Los frascos contenían líquidos que iban desde tonos esmeralda hasta negros más profundos. Al acercarse, se podían apreciar destellos de energía necrótica que centelleaban en su interior. Uno podía sentir la vibración de la magia contenida.

Calderos de hierro burbujeaban con sustancias humeantes. Alambiques antiguos destilaban esencias de magia negra, infundiendo la sala con un aroma penetrante y desconcertante. Las paredes estaban decoradas con símbolos arcanos y runas grabadas con maestría.

El aire estaba saturado de energía mágica, creando una sensación palpable de presencia espiritual. Un silencio casi sepulcral se extendía por la sala, solo interrumpido por el susurro ocasional de la magia en acción. 

—¿Por qué casi no hay gente en la sala? —Pregunté mirando a Lilia quien estaba igual de estupefacta que yo, pero por las razones diferentes.

—¡No puede ser! ¡¿Desde cuándo usan esta sala?! ¡Mira Mizuki, los calderos están encendidos! —Se podía ver un brillo en sus ojos y una gran sonrisa de asombro, ¿Enserio esta es la sala de pociones? Uno creería que seria más extensa o que habría gente vigilándola 24/7, pero...

— ¿Es normal que esté así de vacía? — Mantengo la vista en Lilia.

— No, no es normal... —Escuchar eso me hizo soltar un suspiro de alivio.

—Por lo general está más vacía, si miras fijamente, verás que hay rastros fantasmales lo que significa que hubo gente antes, además, se ve más limpio que de costumbre ¡¿No es asombroso?! ¡Todo lo hicieron por ti!

— ¿E-Es así...? A-A todo esto, se supone que su majestad me había citado ¿No? ¿Dónde estará?

 — Ahora que lo mencionas... Es verdad...

Sin previo aviso, una voz suena del otro lado de la puerta, una voz la cual resuena en la penumbra con una melodía singular, un susurro envolvente que parece reverberar entre las sombras. Cada palabra que pronuncia lleva consigo ecos de una vida pasada, un eco suave pero imponente que retumba en la conciencia de quienes la escuchan. Una voz poderosa e hipnótica. Ante la aparición de esta misteriosa voz, Lilia empieza a cantar un conjuro, solo puedo escuchar el final del conjuro [Filtro sonoro] Una vez que finalizó, el sonido de reverberación de aquella voz cesó y consigo su encanto.

 — ¿Ya llegaste? — Preguntó aquella voz, no puedo ver a nadie, pero hay una voz.

— La princesa Lilia, saluda a su alteza; reina fantasma, Lucía. — Lilia procede a inclinarse al aire, así que me presento y procedo a realizar una reverencia.

— Al menos sabes lo mínimo de modales ¿Eh? — Susurró muy bajo pero aún así pude entenderlo, dudo que siquiera haya intentado que no lo oiga.

 — Mizuki, intrusa en mi reino de sombras, escucha mis palabras con cautela. He decidido que tu presencia aquí merece una atención especial, aunque mi disgusto por tu ser se filtre como un viento helado entre nosotros. Crearás la poción de "Belleza espectral" . No esperes recompensa mundana; tu pago será la experiencia, pero, ten presente que mi tolerancia hacia ti tiene límites. Mis siervos te proveerán de los ingredientes necesarios, ahora bien, me voy, tienes 10 días para fabricar la pócima.

Después de decir eso, la reina desapareció y Lilia suspiró aliviada.

—¿Siempre es así, Lilia?

— No, hoy fue extremadamente suave. — Dijo mirando con enfado la estela que dejó la reina, una estela tan densa que inclusive yo pude ver. Antes de que volviese a hablar se calló y me insinuó que haga lo mismo.

— Acá están los materiales para la pócima. —Fue un fantasma quien estaba moviendo los ingredientes, tenía la forma de un anciano, pero un resplandor fantasmagórico  —Sin decir nada más, desapareció, entre los ingredientes se encontraban; Polvo de sombras lunares, Aumenta el brillo de la piel (Incluso piel fantasmal); Lágrimas del espíritu de la sirena, otorga una melancolía sutil a la apariencia; Esencia de la niebla del olvido, su efecto principal es 'pasar desapercibido' pero en ciertos casos, puede hacer lo contrario; Pétalos de rosa espectral, otorga un olor embriagador a la esencia misma; Agua de manantial etéreo, mejora la claridad de la piel, juventud y misticismo, difícil de conseguir; Cristales de reflexión astral, mejora la luminiscencia de la piel. 

Todos son materiales de alto rango y hay varios que son difíciles de conseguir, al menos dejaron la receta, veamos la receta dice;

En un caldero de mithril verter 300ml de agua de manantial etéreo y calentar a 50°C; añadir las 15 lagrimas del espíritu de  sirena y revolver hasta que se haya integrado; añadir los 25 pétalos de la rosa espectral y 20ml de esencia del olvido, añadir 5 cristales de reflexión astral y 10g de sombra de polvo lunar, al finalizar, recitar el conjuro "En la luz de la luna, en la sombra de la eternidad, nace la Belleza Fantasma."

— Oye... Lilia... ¿Esta receta está bien?— Tras mirar la receta detenidamente, se ven varios defectos, en primera, ¿Por qué la temperatura se mantiene uniforme y a 50°C, a 50°C o no se integran bien ciertos materiales o por el contrario, otros pierden mucho de su efecto.

— uhm... ¿No sé? P-por lo general, no se usa esta sala ¿? — Parece que en verdad no sabe, bueno... supongo que primero trataré de seguir la receta y ver que pasa...

— B-Bueno, voy a empezar, sugeriría que no estuvieses aquí, pero ¿Quieres acompañarme?

 — ¡Si! ¡Nunca había hecho pociones!

— No harás nada, solo observa —Siento que hay algo malo con la formula, pero por el momento no haré nada, solo esperaré

Vertí con cuidado los 300 ml de agua de manantial etéreo en el caldero de mithril, observando cómo la luz lunar bailaba en su superficie. Con determinación, calenté el agua hasta alcanzar los 50°C, siendo meticulosa en mantener la temperatura precisa.

Añadí las 15 lágrimas del espíritu de la sirena con reverencia, permitiendo que su melancolía se fusionara con el líquido etéreo. Mientras revolvía, podía sentir la magia en aumento, creando una sinfonía etérea en el caldero.

Los pétalos de la rosa espectral y la esencia del olvido siguieron en armonía. Con cada adición, la fragancia y la textura de la mezcla tomaban forma. Con sumo cuidado, dejé caer los cristales de reflexión astral y el polvo lunar en la mezcla, observando cómo la poción cobraba vida.

Al finalizar, recité el conjuro con respeto y determinación: "En la luz de la luna, en la sombra de la eternidad, nace la Belleza Fantasma."

Sin embargo, al analizar los resultados, solo dos pociones podían considerarse "exitosas". La prometida simplicidad de la receta no garantizó el éxito deseado...

Cambiando mi enfoqué , determino que modificaré la fórmula de acuerdo a mi percepción. La nueva composición se desenvuelve así: en mi alquimia, empleo un caldero de plata refinada con una capacidad de 500 ml. Vierto con precisión 100 ml de agua de manantial etéreo, elevando la temperatura a 110°C, ligeramente más allá del punto de ebullición del agua.

Con meticulosidad, deposito los cristales de reflexión astral, uno a uno, aguardando a que el anterior se disuelva. Al completar los cinco cristales, el agua de manantial prácticamente ha cedido su forma líquida, dejando tras de sí una pasta resplandeciente. Esta amalgama se vuelve pegajosa, irradiando un fulgor enigmático.

Disminuyo la temperatura a 40°C y de manera gradual incorporo las lágrimas del espíritu de la sirena. El resplandor inicial, blanco y puro, se transmuta en un azul melancólico. Con esmero, agito la mezcla hasta que el color se uniformiza. Luego, reduzco el fuego a 30°C y añado la esencia de la niebla del olvido. La tonalidad cambia a un azul celeste, y persisto en el revuelo hasta lograr una uniformidad perfecta.

En este punto, integro 200 ml adicionales de agua de manantial etéreo al azul celeste. Ajusto la temperatura a 25°C y añado los pétalos de rosa espectral. Observo cómo la parte superior del líquido se torna en un blanco transparente, contrastando con la inferior, que adquiere un azul blanquecino. Una vez que todo está en su lugar, agito con destreza hasta que el color azul se vuelve casi imperceptible a temperatura ambiente. Como toque final, incorporo con precaución el polvo de sombra lunar y para finalizar, recito el hechizo que se describe en el libro. Y el resultado final es...

— ¡Éxito! La primera poción es un exito y es de rango Raro+

—¡Felicidades Mizuki!

—No, todavía no, pudo haber sido casualidad, voy a seguir intentando.

Y así pasó el tiempo, el resultado ahora es que 5 de cada 10 pociones es un éxito, bueno, es mejor que antes, pero siento que aún se puede optimizar...

Han pasado 5 días y ya he hecho 20 pócimas, pero, la formula sigue siendo mala... todavía, solo 6 de cada 10 intentos resulta... No me gusta, siento que puede ser mejor, IA, ¿Puedes ayudarme?

IA: Analizando...

IA tarda un poco al analizar sustancias pero es útil.

IA: Resultado obtenido, maneras de optimizar la formula: [Texto largo]

Entiendo, entiendo la teoría detrás de ello y hay los ingredientes y materiales necesarios, supongo que puedo hacerlo ¿No? Bien ¡Manos a la obra!

El proceso ahora se ha complicado bastante, pero aún es posible, el procedimiento ahora es el siguiente:

En el Extractor de Almas, coloque con precisión 50 ml de agua de manantial etéreo junto con los pétalos de rosa. Active el modo "Centrifugación" y "Extracción".

En un Instrumento de Suspensión Mágica, diseñado para almas, disponga la esencia del olvido en el centro y distribuya estratégicamente 15 lágrimas del espíritu de la sirena alrededor, formando un intrigante sistema similar a un sistema solar. Inicie la rotación de los componentes en suspensión con una velocidad decreciente de 0.1 por cada anillo, permitiendo que las lágrimas de la sirena resuenen armoniosamente hasta que se despierte un canto de sirena.

En el Horno de Almas, inserte 100 ml de agua de manantial etéreo y los cinco cristales de reflexión astral al mismo tiempo. Hornee uniformemente a 270°C durante 3 minutos o hasta obtener una pasta viscosa.

Caliente un Caldero de Plata Pura no refinada a 30°C y añada 100 ml de agua de manantial etéreo.

Vierta la "Esencia Armónica de la Sirena" (resultado del paso 2) en el caldero y revuelva hasta que el agua adquiera una tonalidad rosada y celeste.

Reduzca el fuego a 10°C y añada el Extracto Condensado de la Rosa Espectral (resultado del paso 1). Revuelva hasta lograr una tonalidad morada.

Destile la mezcla en otro recipiente.

Combine la pasta viscosa y el destilado en un bol. Revuelva hasta que la pasta adquiera un tono azul o rosa pastel; en caso contrario, el resultado será considerado un fracaso si persiste el color morado.

Caliente la masa viscosa en un horno a una temperatura de 1000°C por 3 segundos.

Disuelva la mezcla resultante en 100 ml de agua de manantial etéreo

Tras horas de trabajo agotador, este fue el resultado, una "Pócima de Belleza espectral (SSR)" Con mis habilidades actuales 1 de cada 10 intentos me sale una pócima SSR, 4 de cada 10 intentos sale una pócima de rango SR y el resto de tiempo suele salir una pócima de rango R, muy pocas veces sale un fracaso. La habilidad de "Creación" a mejorado a nivel 4 en pocos días, sube más de nivel creando ítems más raros o innovando más que siguiendo la misma receta, incluso si es un fracaso sube de nivel la habilidad, de hecho, si es un fracaso suele subir de 2 a 5 veces lo normal, pero deben ser fracasos para el progreso, no sirve si se fracasa en un ítem por voluntad propia. La velocidad que tardo en hacer pócimas es 1 cada 30 minutos, pero si lo hago con la interfaz de "Creación" se convierte a 1 cada hora y media.

Ya pasaron los 10 días e hice una gran cantidad de pócimas de belleza espectral, tengo 3 pócimas de rango SSR,25 de rango SR, 70 de rango R, Lilia me ayudó a hacer algunas, pero solo pudo hacer de rango R. No importa, ya es momento de que me vaya a presentar con la Reina Fantasma, Lucía.

Con ayuda de Lilia, llego a donde la puerta de la habitación de la reina fantasma, la puerta es similar a la de El Rey Lich, pero su escritura es diferente: "Nacida del deseo de todos y muerta a manos de todos, a quien la locura consumió por el afán de obtener atención, bella hija nacida de la esperanza y muerta por su desgracia, que la luz se aleje de tu cuerpo y alma siendo solo ecos de una interminable 'Fantasía', así pues, aquí vive la reina Fantasma" 

La entrada a la habitación de la reina fantasma se encuentra oculta tras cortinas de niebla que se desvanecen con el más ligero tacto. Una luz tenue, proveniente de velas mágicas que flotan en el aire, ilumina el espacio. El suelo, invisible a simple vista, parece estar hecho de sombras que bailan respondiendo a mis pasos, el temor me invade otra vez pensando en que puedo caer, pero mi voluntad me hace olvidar aquellos pensamientos.

Las paredes están decoradas con patrones que cambian constantemente, mostrando diversas escenas de lo que asumo, es su pasado, presentes alternativos y destellos del inframundo. Un espejo antiguo, cuyos contornos se desdibujan como la niebla, refleja una imagen no de carne y hueso, sino de una belleza espectral, al verme de reojo en el espejo me veo con una forma fantasmal, sufriendo en algún lado, hago lo posible por evitar mirar aquel espejo.  

El lecho real, suspendido en el aire, está cubierto por sábanas de seda que fluyen como la bruma. Alrededor, cojines y almohadas bordadas con hilo plateado conforman un rincón regio. Al acercarse, se percibe un susurro de melodías olvidadas que emana de la nada. 

Un tocador antiguo, adornado con joyas espectrales, exhibe coronas y diademas que desprenden bellos destellos de luz de luna. La reina se pasea entre los vestigios de su vida pasada, observando con ojos que contemplan más allá de las dimensiones conocidas. Unos ojos que han visto cosas inentendibles a nuestro razonamiento.

La habitación de la reina fantasma es una fusión entre lo real y lo surreal, donde la realidad y la fantasía convergen en un espacio que refleja su realeza y su conexión con los reinos más allá de lo tangible. Sin embargo, un rincón específico, al lado de su cama, en su mesa de noche, revela un aspecto intrigante. Varias botellas de elixires están dispersas, algunas con líquidos derramándose por doquier, creando un inusual desorden en medio de la elegancia.

Esta área, que aparentemente ha sido pasada por alto, me genera varias dudas. ¿Representan estas botellas descuidadas experimentos alquímicos inconclusos? ¿O acaso son reflejos de las emociones turbulentas de la reina, manifestadas en forma de elixires derramados? La mesa de noche, con su aparente descuido, se convierte en un elefante blanco en la habitación, una presencia evidente pero sin ser abordada.

Aunque los sirvientes etéreos se desplazan silenciosamente por la habitación, evitan cuidadosamente este rincón particular, como si reconocieran la importancia de su existencia desordenada. La reina, inmersa en sus propios pensamientos y memorias, parece no notar ni ser perturbada por el caos aparente que se manifiesta a su lado. Este pequeño desorden, con sus botellas derramadas, se erige como un recordatorio constante de algo que ella parece preferir no confrontar.

— Su majestad, me presento, soy Mizuki, me presento ante usted para entregarle las pócimas que ha solicitado. — Ninguna respuesta, es como si no me notase. Insisto en presentarme de nuevo, pero la respuesta es la misma, no es hasta que uno de sus sirvientes toca una campana que regresa en sí, aunque con ojos inyectados en sangre.

—¿Qué sucede? ¿Por qué tocas esa maldita campana! — Su cara y cuerpo cambiaron, se deformaron de una manera muy grotesca y su color cambió parcialmente a un rojo vivo.

— Mi señora, la joven Mizuki ha traído su encargo. —Al escuchar las palabras de su sirviente, la reina volvió a la normalidad, centró sus ojos hacia mi, no lo habia visto bien hace rato, pero la tenue luz espectral que envuelve a la reina impide que pueda verle completamente, trato de concentrarme lo más que puedo en observarla pero solo puedo ver unos minúsculos detalles: Su largo vestido que flota a su alrededor, como si estuviera suspendido en el aire, con pliegues etéreos que danzan con cada movimiento. Aunque la tela parece desvanecerse en la oscuridad, deja tras de sí un rastro de destellos etéreos. La corona que adorna su cabeza resplandece con un fulgor suave, recordando la majestuosidad que alguna vez representó en vida. Si bien, su cara está envuelta en un velo se pueden observar sus ojos, ojos que destellan con una luz inusual. Aunque carece de la calidez de la vida se siente algo raro en estos. Aún así, siento como si lo que viese fuese solo un mero recuerdo de lo que fue en su día...

— Las pociones. — Fue lo único que dijo mientras se erguía en donde estaba, lo dijo de una manera muy altanera, pero no tengo más opción que soportar ¿Verdad?

— Aquí está, mi señora, son 98 pociones de las cuales hay 3 pociones de rango SSR. — Antes de que pudiese explicar otras cosas, teletransportó las pociones directamente a su mano y se las bebió, por un segundo, vi como cambiaba el fuego en sus ojos, de un fuego blanco y puro, a una mezcla de matices plateados y azulados con una franja purpura alrededor de donde deberían estar sus pupilas, como si las estrellas mismas se hubieran materializado en sus ojos. La mirada que emana de ellos adquiere una intensidad hipnótica, una expresión de deseo que despierta ante la irresistible tentación de las pociones. Sus ojos, normalmente enigmáticos, revelan ahora un destello de anhelo y anhelan las pociones, sin esperar más tiempo, las pociones hacen su efecto y la Reina, normalmente transparentosa, ahora se ve más brillante y definida a comparación de hace rato.

El entorno de por sí místico de su habitación se ve sacudido, las sombras se mueven con mayor ferocidad y los fantasmas igual, el ambiente empieza a sentirse pesado así como que empieza a descontrolarse, la Reina, tras beberse más de 50 pociones a la vez empieza a reír como una maniática desenfrenada, las llamas que tiene por ojos empiezan a brillar a diferente intensidad sin un intervalo definido, Lilia comenzó a temblar y yo también, el espacio mismo dentro de la habitación empieza a cambiarse, se encoje y agranda a la vez, la risa de la reina se hace cada vez más y más fuerte. Su brillo ha empezado a fallar. De repente, paz... Ya no se escucha ninguna risa y la habitación ha vuelto a ser como antes pero de un modo u otro ha perdido cierto misticismo... Al mirar la puerta veo a Aku, El Rey Lich. Se acerca hacia nosotras y pregunta.

— Con... ¿Consumió alguna poción o elixir?

Se oye un cierto pesar en su voz, no puedo decir nada, sigo en shock por lo que pasó, así que solo asiento con la cabeza y señalo las pociones, ahora desparramadas por todo el lugar. Aku se acerca a estas e inclinándose las toca, luego, vuelve a suspirar.

— No... No hagas más pociones para la reina ¿Bien? No, no hagas nada para la reina, si te habla, ignórala —Vuelvo a asentir con la cabeza y Aku se va sin decir nada más. Lentamente, mis sentidos anteriormente adormecidos por el miedo, despiertan casi por completo, solo puedo ver como Lilia tiene sujetado mi brazo con fuerza, tan fuerte que se ha puesto rojo...

—Deberíamos salir de este lugar —Le digo a Lilia y esta asiente, Lilia está temblando mucho más que yo, su respiración y pulso ya no son normales, su ritmo cardíaco a incrementado tanto que su temperatura ahora es normal, sus ojos no están enfocados a ningún lugar en especial, está mirando a todos lados, está en un estado de hipervigilia... ¿Qué rayos pasó...?