—¡Así que se conocían desde hace tiempo! —Chu Yichen parecía indiferente, era difícil saber si le creía o no.
—Sí, puedes preguntarle. ¿No crees que me mira de manera que sugiere que no soy una extraña para él? —Aunque Chu Yichen no podía ver claramente la expresión de Lu Ming desde lejos, se daría cuenta en el futuro, por lo que su mentira no era inesperada.
—¿Nunca has pensado en ascender socialmente? —Chu Yichen entrecerró los ojos y la examinó.
—¿Cómo puedes juzgarme así? No soy ese tipo de mujer —Li An'an aclaró inmediatamente que lo de ella y Lu Ming era cosa del pasado. En realidad, no era gran cosa. A lo sumo, era solo una rueda de repuesto, solo ilusiones de su parte. —Li An'an reprimió su nerviosismo y sostuvo la mirada abiertamente. Sin embargo, su corazón latía como un tambor, cada vez más rápido. Hay que tener un corazón lo suficientemente fuerte para mentirle a alguien como Chu Yichen.