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Mo Chengfeng no le importaba en absoluto lo que Hillghost iba a hacer.
Aprieto los dientes y ayudó a Mo Ruyue a levantarse del suelo.
Antes de venir, no esperaban que el camino para encontrar la Espada Divisora del Cielo fuera tan difícil y peligroso.
—Ruyue, te sacaré de aquí.
La cultivación de Mo Chengfeng era más alta, por lo que no estaba tan débil como Mo Ruyue.
Sin embargo, sentía que su condición física tampoco era buena.
Al rato, Hillghost apareció frente a Mo Chengfeng con dos frutas en sus manos.
—Squeak, squeak, squeak…
Hillghost saltó rápidamente sobre el hombro de Mo Chengfeng.
Mo Chengfeng comprendió lo que Hillghost quería decir. Tomó una fruta y la comió él mismo.
No había sabor en su boca, pero descubrió que su cuerpo estaba recuperando gradualmente su fuerza.
Puso otra fruta frente a la boca de Mo Ruyue.
—Hermana Menor, come rápidamente esta fruta. Estarás bien después de comerla —gritó Mo Chengfeng y palmeó la mejilla de Mo Ruyue.