- ¡Eh! de tiempo.
Un aura estraña salia de la figura que se acercaba.
-¡Diablos! ¿Otro más? -el seño estaba fruncido la del traje.
La del vestido tenia una gran sonrisa y sus ojos mostraban una extasiabilidad fuera de los limites.
- No me compares con una cosa tan asquerosa - su rostro estaba cubierto por una máscara como los del baile, antiguo de un color dorado brillante.
-¿Quién eres?- una pregunta salió de ambas Noelias.
- Yo debería hacer esa pregunta ¿No crees?- los labios del sujeto mostraban un pequeño crecimiento hacía la felicidad como si hubiera encontrado a su mascota perdida.
El cuerpo original de Noelia se acerco poco a poco arrastrando sus pies con pereza.
-Veo que no eres alguien "normal" ¿Qué ocultas?- haciendo gestos con los dedos resaltando la palabra normal.
-No lo hagas aburrido al hablar de mí. Vine de visita, sabes no me acepta desde el anterior año pero...- volteó a ver detras de Noelia.
Noelia la tapo con una capa rapidamente de material fino pero quien sabe de donde salió, dejando a todos con un silencio.
El extraño rompió el silencio.
- Veo que esta ocupada durmiendo.- hizo una pose intentando parecer tierno, con la mano al rostro inclinando la cabeza mirando a Noelia.
- Bueno debería irme ya se encuentra "OCUPADA".
- ... - el rostro de Noelia se veía molesta y levantaba la ceja en señal de desagrado.
- Bueno adiós vendre otro día.
- ¡No vengas! Nadie te quiere aquí maldito *mbecil - la que habló fue Nevellyn se levantaba poco a poco del suelo pero aún seguía "descansando".
- Por fin despiertas, que felicidad. Ves te dije, no me acepta pero hoy está más suave su comportamiento que lo normal.
- ¡Tch! deberias irte no quiero MALGASTAR MI TIEMPO en personas como tú.
- ¡Ves! Me trata peor que un perro - la señaló con el dedo.
- Mejor fijate a quien señalas el dedo antes de perderlo- advirtió Noelia.
- Cof cof - un bocado de sangre salió, proviniente de Nevellyn.
Los ojos de Noelia sobresalieron en el instante.
- ¡Nevellyn! ¿Estás bien?- Noelia corrió donde Nevellyn como si el fin del mundo estaría por llegar.
- Que debil sigues siendo Nevellyn al final y cabo, bueno debería retirarme de este lugar en el cual no me aceptan.
Los ojos de Noelia y Nevellyn se posaron en el desconocido.
- ¿Qué pasa? ¿Quieres que me quede a tu lado?
El rostro de Nevellyn paso a un estado como si quisiera vomitar.
- ¡Vete! Tu presencia me repugna.
- Esta bien, como deseé señorita.- realizó un gesto de saludo y se fue.
Se retiraba con un pequeño baile como si estuviera felíz.
Noelia vio como el extraño se iba.
Un automóvil negro llegó a velocidad y bajo el chofer para abrir la puerta al extraño con mascarilla; antes de que ingrese al auto hizo una reverencia sonriendo, susurrando " nos volveremos a ver" y se fue dejando un vacío raro en el ambiente como si hubiera dejado escapar a un enemigo grande.
Esto le hizo recordar cuando se conoció con Nevellyn y Leo.