Me desperté. Al abrir los ojos, primero me segó una luz, pero a medida que se me aclaraba la vista, podía ir distinguiendo figuras humanas hablándome en un extraño idioma que, a decir verdad para a mí, solo balbuceaban.
Traté de decir algo, pero solo moví la boca. Unos pocos minutos después de aquello me di cuenta de que era un bebé.
2 meses después, ya caminaba y hablaba a la perfección.
6 años más tarde por fin pude salir a fuera de la casa, lo primero que vi fueron los edificios, todo era increíble, las construcciones eran estilo Europa, pero por alguna razón me daba aires a, pero, que por cierto el continente en el que actualmente vivo se llama Thalord, la gente vestía ropa europea con toques peruanos, claro de épocas antes de ahora, o de 2024 refiriéndome a la época en la que viví alguna vez. Iba mi madre a algún lugar, al llegar lo vi y...
<¡vaya un detestado más!> dijo un niño de al menos 8 años con aspecto de rico, en tono burlón.
Me dirigí a por comida, en la barra donde estaba la comida solo había una sopa con un aspecto desagradable, la verdad por eso prefiero el perico.
Me di la vuelta y vi a un niño de unos 7 años con una chaqueta muy remendada y sucia, unos zapatos rotos y su pantalón estaba más lleno de agujeros. Jose vio mi cara al ver la sopa y me dijo. <¡no!> bueno, eso lo dije en mi mente. Me senté con Jose y compañía. 2 años después, ya éramos buenos amigos (me acostumbré a ellos), ya me había acostumbrado al orfanato. Un día antes de mi cumpleaños número 8 ocurrió algo impresionante. Por ahí de las 11:45 pm no me podía dormir. <¡Ya recordé!, tú eres el tipo de aquella casa, y la voz en el limbo.> <¿Por qué es extraño?> <, pues, porque no deberías recordar tu vida pasada y normalmente cuando escuchas una voz a altas horas de la noche, cuando estas solo te espantas, no dices lo primero que pasa por tu mente> dijo la persona con un aura misteriosa y algo irritada. Me di la vuelta y lo vi. Era el mismo hombre de traje de antes, pero esta vez flotaba. <¿que eres?> <¿yo?, Soy el dios inzalo, dios de la existencia misma> <¿Y qué tengo yo que ver con un dios?> <¿y, porque yo?> Quise decir algo más, pero me quedé dormido sin más. Al fin era mi cumpleaños. Fui al comedor emocionado para encontrarme con sus amigos, pero lo único que vi fue a unos guardias del castillo merodear, apenas me vieron, vieron, me agarraron por los brazos alzándome. <¡E aquí el héroe que salvará Thalord del rey demonio, NARCISO FLORES!> (El continente donde están se llama Thalord y la capital es nueva Thalord) dijeron los guardias del castillo, sin previo aviso, me secuestraron. <¡Te maldigo, Inzalo!, ¡¿me oyes?! ¡Jódete, maldito, estúpido! Grite con furia, digo, si ni perico me deja producir, pues que al menos me deje en paz, ¿no?