En la tableta de jade, el número detrás del nombre de Tianyun seguía saltando, aparentemente incapaz de detener a Lu Ming.
Cuando Lu Ming alcanzó el vigésimo nivel, los soberanos que estaban clasificados detrás de él eran los más rápidos. Ellos solo habían pasado el duodécimo nivel. La diferencia era demasiado grande.
El resto de las personas alrededor de la plaza se quedaron calladas. Aquellos que decían que Lu Ming solo confiaba en su juicio también se quedaron callados.
—¿Cómo podría romper la formación tan rápidamente solo con su vista? —Ni ellos mismos se lo creían.
—¡Maldición! ¡Detestable! —En la multitud, el Amanecer rugía de ira. Los otros paragones que habían sido golpeados por Lu Ming antes también tenían expresiones feas.
El número de niveles que Lu Ming había despejado seguía aumentando rápidamente.
Poco después, Lu Ming rompió con éxito el nivel veinticuatro y se apresuró hacia el veinticinco.
A este nivel, la velocidad de Lu Ming finalmente se redujo un poco.
