—Todos abrieron los ojos de par en par por la sorpresa. La persona que retrocedía era en realidad Aokun —dijo alguien.
—Aokun había sido de hecho forzado a retroceder siete pasos por el puñetazo de Lu Ming. ¿Cómo era posible? —murmurö otro sorprendido.
Por otro lado, el cuerpo de Lu Ming solo se balanceó un poco.
—En un intercambio de puño a puño, Lu Ming en realidad llevaba la ventaja. ¿Acaso Lu Ming seguía siendo humano? Simplemente era una bestia en forma humana.
—Como se esperaba de un Dragón de Inundación con 50% de sangre de dragón verdadero. ¡Es realmente poderoso! —exclamaron admirados.
Los ojos de Lu Ming brillaron con sorpresa.