—Lu Ming y los demás están a punto de alcanzar la salida. Pronto se encontrarán con Jiang Taixu y los demás. —murmuró alguien entre la multitud.
—Jiang Taixu, Wang Jue y Luan Zhan suman casi 80 expertos. Lu Ming y los demás no pueden ser rival para ellos. ¿No estarían buscando la muerte si se lanzan hacia adelante de esta manera? —alguien comentó con preocupación.
—¿Tal vez tienen una estrategia? ¡Esta batalla definitivamente será emocionante! —exclamó un espectador ansioso por el desenlace.
Muchos ojos se iluminaron mientras miraban la imagen en la tablilla del Rey Divino. También había mucha gente discutiendo sobre ello.
¡BOOM! ¡BOOM!
En ese momento, de repente todos sintieron dos auras tan profundas como el océano sobre sus cabezas. Una presión enorme se les impuso como las antiguas montañas divinas.
Todo el mundo miró hacia arriba conmocionado.
En el cielo, habían aparecido dos jóvenes figuras.