—¿De qué sirve la erupción de un linaje sangriento? ¡La garra de la primavera amarilla! —El joven del manto gris atacó de nuevo con su garra. Un aterrador río rodeaba su brazo, y el mundo se llenaba de lamentos fantasmales y aullidos de lobos. Era extremadamente aterrador.
Gao Qiang soltó un rugido furioso y avanzó a la carga. Su energía era desenfrenada, y el terrorífico brillo de su puño hacía temblar continuamente el vacío.
¡Bang! ¡Bang! Un estruendo retumbó, pero después de solo unos pocos movimientos, Gao Qiang fue forzado a retroceder. Todo su cuerpo estaba cubierto por una capa de niebla negra, y escupió un bocado de sangre.
Gao Qiang fue derrotado. No era rival en absoluto. Por otro lado, la otra parte parecía estar muy relajada. Era desconocido cuánta fuerza había usado.
Era obvio que la diferencia era demasiado grande.
—¿Quién eres tú? —Gao Qiang rugió a regañadientes.
—Gui Jiu de la secta del cadáver celestial —El joven del manto gris respondió con indiferencia.