Gabriel había subido durante mucho tiempo, intentando salir de la oscuridad. Según él, debería haber estado lejos del suelo. Sin embargo, cuando empezó a descender, en unos pocos segundos, sus pies aterrizaron en algo sólido.
Era como si hubiera alcanzado el suelo, lo cual era difícil de entender. Era como si el espacio y el tiempo estuvieran distorsionados en este lugar.
Además, tan pronto como aterrizó en el suelo, la oscuridad parecía comenzar a retroceder.
Una vez más podía ver la hierba oscura bajo sus pies. Era como si estuviera de vuelta en el jardín otra vez. Sin embargo, ¡lo extraño era que su entorno era diferente!
Era como si no estuviera en la Ciudad Real de Arecia. ¡Además, no era el jardín en absoluto! Era solo que la hierba era similar.
