—Si eso es lo que quieres, entonces lo permitiré. Podemos darte una habitación en mi palacio a menos que quieras vivir en la ciudad misma —Blake no quería tomar decisiones firmes ya que quería que la Princesa Danaphine se sintiera cómoda dondequiera que decidiera quedarse—. Decidiré una vez que todo esté confirmado —La Princesa Danaphine dio una sonrisa misteriosa antes de decir—. ¿Entonces, regresamos?
—De acuerdo —Blake asintió y deslizó su mano alrededor de la cintura de la Princesa Danaphine. Ella sonrió y lo abrazó fuertemente mientras desaparecían de las costas que solían ser el hogar de Blake.
Blake reapareció en la sala del trono dentro del castillo en Ciudad de Javanie solo para ver una escena que no deseaba ver. —Mina, ¿por qué todos estos caballeros están de rodillas postrados ante ti?