—¿Está todo listo? —preguntó Tina mientras estaba parada en medio de la Ciudad del Destino, mirando todas las decoraciones que se habían hecho y esparcido.
—¡Sí! Blake está atendiendo a Lillia, dándole un poco de ejercicio antes del matrimonio. Debería terminar pronto, y podemos comenzar —respondió Mina. Ella había sido la que más emoción tenía respecto a esto. Le debía mucho a Blake y a Lillia y quería que ambos fueran muy felices.
—¡Bien! Todos los demás están listos, así que solo necesitamos a la novia —Tina aplaudió y todas sus hermanas se apresuraron a vestirse. Tina trajo a sus hijas con ella para que también se cambiaran. Madre e hijas estarían una al lado de la otra mientras Destino estaría con Esperanza sobre el escenario junto a Tina. Tina sería la que actuara como la sacerdotisa.