Después de algunas pláticas más, Emerson y Michelle dejaron la Mansión del Lago Dorado.
—Esposo, ¿qué vas a hacer? —preguntó Samira mirando a Aethelwolf. Julie también lo miraba en silencio. Ya habían escuchado sobre el asunto en Warmridge de él. También conocían el contenido de su conversación ya que él instaló una runa que les permitía escuchar su conversación.
—Necesitamos mantener este lugar a salvo. Para hacer eso, debemos dejar que esos nobles actúen antes de que Warmridge caiga —Aethelwolf respondió con una mirada seria.
—Debes tener cuidado. Aparte de la Familia Suliman, no podemos confiar en nadie aquí —Julie dijo mientras sostenía su mano.