Apareció en el sofá como de costumbre, pero Lia no se encontraba en ningún lado.
Bajó las escaleras para buscarla.
Yami estaba ocupada preparando el almuerzo en la cocina.
Rio tampoco la encontró allí, así que decidió enviarle un mensaje telepático.
—Oye cariño, he vuelto. ¿Dónde estás? —le preguntó con tono ansioso.
—He salido del castillo. Volveré pronto. Deberías buscar a padre en el castillo. Quiere hablar sobre tus próximas misiones —le dijo ella de manera dulce.
—¿Dónde lo encuentro? —preguntó él.
—Solo pregunta a Yami —dijo ella con su voz suave.
—Está bien, que te diviertas afuera —se despidió de ella.
Le preguntó a Yami, quien lo guió al castillo.
Dylan estaba en su sala de estudio haciendo algunos papeleos.
Yami pidió permiso al emperador y entraron en la habitación.
Dylan indicó a Rio que tomara asiento mientras hacía sus papeleos, y Yami se fue después ya que su tarea estaba concluida.