Eve guió a Rio de vuelta al maravilloso reino, donde luego organizó su camino hacia el interior de la Villa de la Emperatriz.
Con su poder espacial, cambió sin problemas el paisaje fuera de la barrera de su reino del bosque maravilloso, transformándolo en los lujosos enseres y decoración del familiar dormitorio de la Villa de la Emperatriz.
Al entrar Rio en el dormitorio de Lia, lanzó una última mirada persistente a Eve, que había estado con el chico ayudándolo durante su viaje en el Reino de la Muerte. La barrera detrás de él se cerró al dar otro paso hacia el interior de la habitación.
Respirando aliviado, Rio finalmente se sintió tranquilo, de vuelta en su mundo, rodeado de sus amorosas esposas en lugar de los constantes peligros a los que se había enfrentado. Sus ojos recorrieron la habitación, pero parecía estar vacía.
Tan pronto entró en la Villa de la Emperatriz, su presencia llamó la atención de dos chicas a lo lejos.
