Mientras tanto, Rio enviaba un mensaje telepático a Lia:
—Hola, cariño. Tengo una pregunta para ti. ¿Cómo te sentirías si algo le pasara a Leona?
La voz helada de Lia resonó a través de los pensamientos de Rio, impregnada de frialdad y preocupación:
—¿De qué estás hablando? No juegues conmigo. Helia ha estado a mi lado desde la infancia. Ella es mi hermana, y si algo le pasara, me rompería el corazón. Entonces, ¿por qué preguntas por ella de esta manera, esposo?
A pesar de su anterior arrebato emocional, el amor de Lia por Rio brillaba a través de sus palabras, dejando claro que no podía permanecer enojada con él por mucho tiempo.
Sin embargo, Rio permanecía en silencio, enfocado únicamente en el objetivo frente a él.
Helia estaba en sus fuertes brazos y él la sostenía firme contra él mientras corrían hacia su destino. Cruzaban el desolado paisaje, los ojos de la chica fijos en el horizonte, intentando divisar alguna señal de la sombra.