—¡Agh! ¡Ese maldito bastardo! —La explosión liberó un fuego y humo en forma de hongo que se elevó en el aire cientos de metros. Parecía que acabara de explotar una bomba nuclear aquí, y luego un viento feroz aulló y vino por los tres.
El fuego apareció negro al principio, mezclado perfectamente con el humo. Luego se expandió hacia fuera, creciendo rápidamente en tamaño, pasando de negro a azul, luego a naranja y finalmente a rojo.
William no salió mejor parado que los otros dos. Zin maldijo cuando se levantó a decenas de picos de distancia. Esta explosión envió a los tres en diferentes direcciones, pero por suerte no les quitó la vida ni los lanzó por los aires ni nada por el estilo.
—¿Qué demonios acaba de pasar? —Ibra se levantó, apagando el fuego que había alcanzado su armadura y uniforme—. ¿sólo una niebla y un símbolo raro es suficiente para liberar tal poder de destrucción? ¿Quién diablos es ese hombre?
