Incluso el anciano Stark sintió el mismo inmenso shock cuando llegó allí. Toda la Arena de Combate estaba ahora rodeada de profundas trincheras, muchas trampas y formaciones defensivas que convertían todo el lugar en una fortaleza.
El bando de Ricardo hizo todo lo posible por infiltrarse a través de tales fortificaciones, acabando por perder a muchos maestros solo para reclamar un pequeño espacio. Cuando el anciano Stark llegó, y después de superar su shock, se dio cuenta de por qué Lara se atrevió a hacer esa locura.
Ella no estaba esperando ociosamente aquí para ser rodeada y atacada. Cuando vio tales medidas defensivas llenando todo el lugar alrededor, supo que esta guerra no estaba perdida, aún no.
Cualquiera del lado de Lara al ver esto vio su moral dispararse de nuevo. Todos pensaron en el oscuro futuro de su familia, pensaron en el destino ineludible de perder a su líder. Pero cuando vieron esta escena, todos supieron que aún había esperanza.