Steve se quedó atónito cuando oyó lo que Jack dijo. No podía creer que Jack no fuera a ayudarles en absoluto.
En cuanto a lo que estaba hablando, cómo lo habían tratado a él y a su madre durante los días de gloria de la familia Alfonso, no lo pensó en absoluto.
—¡Ingrato! No me creo que realmente tengas la sangre de la familia Alfonso corriendo por tus venas. Realmente nos deshonras a la familia Alfonso —gritó Steve a Jack con ira.
Al instante siguiente, corrió hacia Jack con la intención de golpearlo. Estaba tan enfadado con Jack que ignoró por completo entender por qué Jack estaba aquí, así como el hecho de que Denali, la persona que toda la alta gerencia conocía como una verdadera figura importante, estaba realmente siguiendo a Jack.
En su ira, de hecho olvidó cualquier cosa como esa. Ante él, Jack todavía era el bastardo al que estaba acostumbrado a intimidar en aquel entonces. Aunque ahora tuviera algo de dinero, eso no cambiaba el hecho de que solo era un bastardo.