Jack decidió preguntarle a Tracy si había alguien presente en la empresa que pudiera entrenar a la gente. No quería solo músculos, las habilidades eran muy importantes. Así que, los veinte todavía tenían que ir y entrenar sus habilidades y cómo se suponía que reaccionaran en situaciones específicas.
—Hola jefe —respondió Tracy.
—¿Cómo van las cosas de tu lado? —preguntó Jack.
—Van bien. Para la próxima semana, la fusión debería estar completada —respondió Tracy.
—Eso es bueno. De todas formas, ¿hay alguien entrenando a los guardias? —Jack preguntó.
—Sí. Hay uno que estuvo en el ejército antes. Después de que se lesionó, ya no pudo seguir allí y por eso, decidió venir y hacer algo más simple. Ahora entrena a los guardias especiales que siempre asumen las tareas de guardaespaldas —explicó Tracy.
—Ok, lo tengo. Infórmale que me gustaría enviar gente para que él los entrene. Deben ser entrenados en todos los medios posibles —Jack declaró.