Tan pronto como El Íncubo miró a Anon levantándose de su mesa, sonrió y comenzó a caminar hacia Anon.
—Está muerto —dijo Mike con una sonrisa al girarse hacia él y mirar la escena sonriendo.
—Oye chico, deberías volver y sentarte en tu mesa de nuevo, antes de que clave mi maldita espada en tu guapo rostro —habló El Íncubo mientras sacaba su espada y la apuntaba hacia el rostro de Anon.
—Oh, ¿no es este juguete aterrador? —habló Anon mientras tocaba la punta de la espada y le daba un pequeño apretón.
En cuanto Anon apretó la Espada, aparecieron grietas por todas partes y en solo un segundo… Toda la espada se desintegró en polvo.
*Crack*
*Ting-Ting-Ting*
—¿Qué demonios-?
Cuando esto ocurrió, todos los miraron con expresiones de sorpresa y shock.
—Deberías usar una espada real la próxima vez —habló Anon mientras sacaba una bocanada de su cigarro y soplaba el humo en su rostro.
Anon luego caminó hasta Jedy y tocó su rostro lentamente.
