Wolfe sonrió con suficiencia cuando comenzaron a huir y se volvió para enfrentar al Rey.
—¿Qué te parece? Es bastante eficiente, ¿no es así? Si hubiera hecho cien de ellos habría sido aún más efectivo, pero creo que uno de ellos transmitió el mensaje lo suficientemente bien —anunció.
—Eres un loco. ¿Qué has creado que puede destruir un ejército al instante? ¿Y qué hay de las reglas de guerra? Los Comandantes no deben enfrentarse en el campo contra los hombres enlistados —respondió el Rey.
—No soy un Comandante, ¿verdad? Solo soy un Alcalde de visita y el jefe de una Familia Mágica. A decir verdad, ni siquiera soy un oficial militar en casa, era un explorador enlistado cuando dejé el servicio. Entiendo que podrían tener algunas objeciones a que un combatiente de Rango Seis se una a la batalla contra los rangos del frente, pero ellos tenían hechizos defensivos de Rango Cuatro —Wolfe estuvo de acuerdo.
