Cuando Archer y Teuila entraron a la casa del árbol, él vio al resto de las chicas holgazaneando en la sala de estar charlando. Pero cuando lo vieron, aparecieron sonrisas antes de levantarse y saludarlo con un beso y un abrazo, lo cual le encantaba.
Ella fue la primera en hablar cuando se apartó de él—¿Cómo estuvo el reino? ¿Te reuniste con Aisha y Mohamet?
Archer asintió en respuesta mientras se sentaba—Sí, les di mis instrucciones sobre cómo construir mi territorio, lo cual fue bien. Creé algunas leyes y conseguí que una familia de enanos famosa por su artesanía sirviera al reino.
Todos sonrieron antes de que Nefertiti dijera con suspicacia—¿Estás planeando reclamar a Aisha? Viendo que ella es tu reina.
Él pareció sorprendido pero respondió honestamente—Sí, pero ella no está interesada en mí ahora ya que todavía soy joven y nunca olvides que vosotras chicas ya sois mis reinas, pero dudo que quieran el dolor de cabeza de dirigir un reino incipiente con millones de ciudadanos.