—Teuila retrocedió avergonzada cuando escuchó el comentario de la chica dragón —.Cállate, Sera. ¿Por qué sacas temas tan lascivos en un lugar como este? Estamos caminando por un bosque espeluznante, ¡y tú quieres hablar de sexo!
—La chica dragón se rió antes de revelar su plan —.Pues, cuando finalmente me encuentre con mi amorcito, haré el amor con él.
—Al escuchar el comentario de su amiga, Teuila suspiró, pero se encendió una chispa en su mente, lo que la llevó a querer hacer el amor con él.
—Ella sacudió la cabeza y se concentró en su entorno, pero pasaron horas. Una luz extraña apareció sobre ellas, lo que las asustó.
—Al darse cuenta de que reproducía la luz del sol, una sensación de alivio las inundó. Continuaron adelante por otro día, solo para descubrir que la luz desaparecía de nuevo.
—Esta vez, se encontraron afuera de un pueblo abandonado, una escena familiar a la que ya estaban acostumbradas.